En la rejilla de prácticas el canadiense Walter Zuk aceptó que besó a una niña de tres años en la boca, pero se dijo inocente de los cargos de abuso sexual y corrupción de personas menores que se le imputan.
Sobre las niñas con las que fue videograbado, afirmó desde la ventanilla del Juzgado Quinto Penal conocer a las niñas desde que una de ellas “era bebé” y que las besa “en los cachetes y en la boca”, pero en ninguna otra parte del cuerpo.
Zuk negó que haber estado solo con las menores, además de que siempre las ve en la calle. Al momento de ser detenido, indicó, que los padres de las menores se encontraban cerca y que el año pasado les regaló bicicletas a las niñas “porque ellas no tienen porque son pobres”. Cada que puede, comentó, que les obsequia dulces, cereales y dijo haberles regalado 300 pesos en efectivo.
Ante los señalamientos de la diputada local del PRD, María del Carmen Cabrera Lagunas, vocal de la Comisión de los Derechos y las Niñas, Niños y Adolescentes del Congreso local, quien ayer afirmó que el verdadero nombre del inculpado es de Williams Lee Suk y que contaba antecedentes de pedofilia en Canadá y Quintana Roo, el canadiense negó tener antecedentes en su país; sin embargo, reconoció que en Canadá también ha besado a algunos niños, pero no en la boca, como lo hizo en Acapulco frente a una cámara de video, destacó la agencia Quadratín.
Walter Zuk fue detenido por elementos de la Gendarmería en la Costera el pasado miércoles 27 de marzo e internado en el penal de Acapulco la noche del lunes 28, hasta antes de estos hechos se hospedaba en hotel Twin Towers.
Excelsior