Los ritmos ucranianos de la agrupación músico-vocal instrumental DakhaBrakha puso de pie a todos los presentes en el Teatro de los Héroes, que ofrecieron uno de los más cálidos aplausos que se hayan registrado en ese recinto cultural.
El extraordinario cuarteto formado por Marko Halanevych (voz, darbuka, tabla, didgeridoo, acordeón, trombón), Iryna Kovalenko (voz, djembe, bajo batería, acordeón, percusión, Bugay, zgaleyka), Olena Tsibulska (voz, bajo batería, percusión, garmoshka), Nina Garenetska (voz, chelo, contrabajo tambor), mostró la riqueza cultural de Ucrania a través de un mundo de inesperados sonidos instrumentales y vocales que crearon una efervescencia entre los presentes, llevándolos de la suavidad del chelo al rugir de los tambores en una sola melodía.
DakhaBrakha (“dar /tomar” en ucraniano viejo), creado en 2001 en el Centro de Arte Contemporáneo de Kiev “DAKH” por el director de teatro de vanguardia, Vladyslav Troitskyi, se ha convertido ya en un fenómeno de culto en su tierra natal y conquistando en mundo a su paso presentó su “caos étnico”, lleno de música nueva e inesperada, en el marco de la décima edición del Festival Internacional Chihuahua. ‘‘Gracias amigos’’ ‘‘Chihuahua’’, dijo entre sonrisas y en perfecto español, el carismático Marko Halanevych, ganándose de nuevo a la audiencia.
Añadiendo a la música popular ucraniana los ritmos del mundo y con influencias de culturas árabe y africana, combinando instrumentos australianos y rusos, la propuesta se convierte en algo único, original y atrapante, desde el impresionante manejo de voces perfectamente destacadas en grupo o en solitario, hasta los sonidos que salen de cada uno de los múltiples instrumentos utilizados en escena y hasta la portentosa personalidad escénica de los cuatro integrantes, dejaron a todos sin respiro.
La frase ‘‘Viva la libertad’’ en voz del varón del grupo, tomó un significado mayúsculo y acalló a la audiencia al interpretar el tema, ‘‘Baby’’.
DakhaBrakha es raíces, es cultura, es amor, es pasión, entrega, folclor, unión, música, teatro, belleza…
DakhaBrakha son las ganas de hacer algo extraordinario, sin perder la identidad. El indescriptible concierto terminó con una ovación de pie y con la bandera ucraniana en manos de Marko Halanevych, en señal de paz.
Así, el cuarteto del este de Europa se convirtió en una de las grandes revelaciones de la programación del 10º. Festival Internacional Chihuahua.
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