Luego del encuentro entre los aspirantes a las alcaldías de Chihuahua y Juárez, sigue el nada para nadie, y solo se acordó contener el “fuego amigo” que de amistoso, no tiene nada.
Tal como le adelantamos, en Chihuahua Leonel De la Rosa juntó a los seis suspirantes, en Juárez a los cuatro que tienen posibilidades. El mensaje fue claro, más que el candidato, al PRI le interesa la unidad. Obviamente, todos supuestamente de acuerdo. La pregunta aquí es ¿De qué sirve tanta reunión si el fuego amigo y las patadas bajo la mesa están al día?
El domingo pasado, por la mañana, mientras todos esperaban el juego de la NFL entre los Patriotas y Houston, una imagen circuló en as redes sociales de manera impetuosa y poderosa, se traba del polémico ViveBus donde una pagina en facebook criticaba al Gobierno Estatal porque sus camiones al parecer tienen la entrada al lado opuesto de la entrada de las estaciones. La foto iba acompañada de la leyenda: «La buena noticia es que los camiones del ViveBus sí caben en su carril, la mala es que traen las puertas del lado contrario» Tenía decenas de comentarios y compartida más de 500 veces, esta columna se dio a la tarea de saber de quien se trataba la autoría del nuevo popular meme y resultó que surgió justamente por un trabajador de Ricardo Bonne, osea el golpe iba directito y a la cabeza al más fuerte de los contendientes priístas por la alcaldía, Javier Garfio. Como diría el grupo Intocable ¿Y todo para qué… don Leonel? Al final, la imagen fue borrada de facebook por los mismos que la subieron ¿Hubo regaño o cumplió su cometido?
Tras el genocidio político en el PAN, 800 “liderazgos”, ya sabe, todos los que alguna vez han tenido un hueso, o han aspirado fuerte a alguno, se reunieron para darle forma a la Reunión Estatal de Estructuras.
Así, quieren subsanar las bajas sufridas y reorganizar lo que queda de la tropa, para hacer el papel más decoroso posible. Para esto, se contempla eliminar la figura del adherente, y otros cambios para fortalecer la estructura interna del PAN. ¡Firmes!
Con todo, el PAN todavía es, aunque a mucha distancia, la segunda fuerza política de Chihuahua, y algunos corazones azules laten fuerte, pues aunque pocos, aún hay huesos disponibles. ¡A roer!
En el PRI, la designación de Fernando Mendoza podría ser interpretada como un apapacho a Maurilio Ochoa en sus aspiraciones por la alcaldía, sin embargo estas especulaciones son echarle aire a la lumbre. La decisión, a estas alturas, ya debe estar tomada o casi tomada, y sepa usted cual sea. Aparte, la ventaja de Garfio sigue pareciendo clara, lo que muchos ignoran es que a la vez de ser gran amigo de Duarte, Garfio la lleva bastante bien con Marco Quezada.
Y ya que hablamos del PRI, le tocó el turno a Omar Díaz, ex líder del Frente Juvenil Revolucionario (FJR) en Chihuahua, quien cayó en las manos de la Ley, armado, con droga, y hasta una granada de fragmentación.
Las huestes priístas, caracterizadas por su solidaridad, de inmediato dieron la cara, pero para deslindarse de Díaz Arias. Raúl Saucedo, actual presidente estatal del FJR, Fernando Mendoza, dirigente municipal del PRI, y hasta Christopher James Barousse, presidente nacional del Frente Juvenil Revolucionario, se movilizaron de inmediato para pintar su raya de Díaz, quien es dueño del bar Las Ánimas, un establecimiento donde concurre todo tipo de fauna urbana.
Pero el joven Díaz no es el primero en ser tentado por el crimen. Ya la joven Sarah Fuentes, líder de las juventudes panistas, estuvo en el ojo del huracán tras aparecer en redes sociales portando un arma de alto poder, aunque luego aclaró que era de un amigo suyo, agente de la FGE, temas totalmente distintos pues lo que pasó con la chica azul fue simplemente una fotografía, mientras lo de Díaz un delito federal catalogado como grave.
Mucho más sonado fue el caso del joven Carlos Borruel Macías, hijo del entonces alcalde Carlos Borruel Baquera, quien apareció en varias ocasiones portando armas, y ya eran una leyenda urbana sus arranques de prepotencia, que lo indujeron incluso a llevarse un muy buen susto allá por el Periférico de la Juventud, cuando se topó con malosos de a de veras. Para rematar, tiempo después lo hallaron conduciendo una camioneta robada, en Puebla.
Y ya que hablamos de los Borruel, resulta que el ex alcalde está levantando ámpula con su “jacalito” de 20 millones de pesos, en el humilde fraccionamiento San Francisco, así como algunos regalos que generosamente entregó a familiares, como una carcachita Audi, 2013. En el PAN, dicen que ni en abonos chiquitos corresponde a sus salarios, y quieren que se le investigue.
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