Conecta con nosotros

Resto del mundo

Esperan repatriación de connacional fallecido en tiroteo de Kansas

El cuerpo de Francisco Anaya, migrante originario de Comonfort, Guanajuato, y quien falleció durante un tiroteo dentro de un bar en la ciudad de Kansas, Estados Unidos, será repatriado y podría llegar a principios de la semana entrante.

En tanto, sus familiares en México piden apoyo para que su hermana Selena, pueda viajar con el cuerpo de Francisco, para sepultarlo en el panteón municipal y ella regrese a los Estados Unidos.

“Yo le pedí la ayuda para mi hija, para que ella pudiera venir a dejar a su hermano. Le pedí también ayuda para trasladar a mi hijo, lo principal que yo pido es que me traigan a mi hijo a mis brazos”, expresó Marcelina de Jesús García, madre de Francisco.

Los familiares del joven también solicitan a las autoridades estadounidenses y a la Secretaría de Relaciones Exteriores que se haga justicia y que el delito no se quede impune.

Francisco tenía 35 años de edad y vivía en Estados Unidos desde que tenía 12, tiempo en el que viajó con sus padres en búsqueda de una mejor calidad de vida.

Él, junto con su hermana aplicó y consiguió entrar dentro del programa DACA, sin embargo, sus padres decidieron regresar a México hace dos años.

En tanto, autoridades del gobierno de Guanajuato y el alcalde de Comonfort, José Carlos Nieto, se comprometieron su apoyo para la repatriación del cuerpo de Francisco, así como para solventar los gastos funerarios.

“Y lo que nos piden pues es la tramitología, obviamente si podemos apoyarlo con algunas otras circunstancias del sepelio y eso, estamos a su disposición, pero hasta ahorita solamente la tramitología de los permisos de la administración”, manifestó el edil.

En México sus padres, familiares y amigos lo esperan para darle el último adiós.

Excelsior

Resto del mundo

Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.

Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.

En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.

Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.

Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.

 

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto