El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Coahuila exhorta a la población a evitar el consumo excesivo de bebidas embotelladas, ya que se puede desencadenar un serio problema a la salud.

Algunas consecuencias de la ingesta en exceso de refrescos son: enfermedades crónico-degenerativas, osteoporosis, gastritis, daño dental, insomnio, problemas renales, sobrepeso, obesidad y enfermedades cardiovasculares.

Martha Yolanda Cervantes Flores, jefa de la oficina de Dietoterapéutica y Enseñanza en el Seguro Social, explicó que las bebidas embotelladas se componen de fósforo, sodio y cafeína.
El primero predispone el desarrollo de piedras en los riñones (litiasis renal) y osteoporosis; el segundo puede desencadenar hipertensión arterial y el tercero afecta el sistema nervioso con alteraciones como insomnio.

Mencionó que la ingesta genera resistencia a la insulina, la cual provoca que las personas se conviertan en candidatas a sufrir diabetes mellitus. Mientras que para los pacientes con problemas renales, representa un alto riesgo a su condición.

En cuanto a los líquidos en versión «light», detalló que quienes padecen diabetes pueden consumirlos en forma ocasional; en exceso generan complicaciones debido a que contienen un sustituto de azúcar (aspartamo) en grandes cantidades.

La recomendación primordial es sustituir los refrescos por agua simple o de sabor preparada con frutas naturales de temporada, que resultan más ricas y nutritivas para acompañar los alimentos.