Mientras México discute sus primeras iniciativas de ley para reglamentar el consumo legal de la mariguana con fines recreativos, casi 50 países le llevan la delantera, desde hace décadas, en la explotación industrial de la mariguana sin agentes sicoactivos o cáñamo industrial.
Tan sólo en 2011 se cultivaron en el mundo 81 mil hectáreas de esta planta, de acuerdo con el estudio Hemp as an Agricultural Commodity (El cáñamo como un producto agrícola) de Renée Johnson, que el Congreso estadunidense difundió en febrero pasado.
Brasil, Bulgaria, Chile, Uruguay, Canadá, Ghana, Gran Bretaña, Estados Unidos, Finlandia, Kenia, Malawi, Mozambique, Nigeria, Rumania, Suiza y Su-
dáfrica, entre otros países, participan de un negocio legal que, según el mencionado estudio, en 2013 generó 581 millones de dólares en Estados Unidos y ventas millonarias en todo el mundo.
A lo largo de la historia, diversas culturas han aprovechado la cannabis sin propiedades sicoactivas.
“Es más barato hacer etanol con mariguana industrial porque se recuperan sus semillas, ricas en Omega 3 y más proteínas que la soya. El etanol, a partir de maíz, usa los granos”, dijo a Excélsior Hugo St-Onge, líder del partido Bloc Pot de Quebec, Canadá.
Blair T. Longley, líder del Partido Mariguana de Canadá —que en 2011 superó al Partido Nueva Democracia— dijo que México desaprovecha esta industria, que genera más de 25 mil productos, de manera histórica, pues la prohibición de la cannabis se originó en 1914 en El Paso, Texas, para afectar a los mexicanos, sin parecer racistas. “El video Grass History of Cannabis Marihuana, en la red, cuenta la historia”, concluyó Longley.
Con información de Excélsior