Los precios al consumidor en Estados Unidos se dispararon el año pasado a su nivel máximo en casi cuatro décadas, lo que ilustra una inflación al rojo vivo que prepara el escenario para el inicio de las subidas de tipos de interés de la Reserva Federal (Fed) a partir de marzo.
El índice de precios al consumidor subió 7 por ciento en 2021, la mayor alza en 12 meses desde junio de 1982, según datos del Departamento de Trabajo publicados este miércoles. El indicador de inflación ampliamente seguido aumentó 0.5 por ciento desde noviembre, superando las previsiones.
Los precios al consumidor en Estados Unidos se dispararon el año pasado a su nivel máximo en casi cuatro décadas, lo que ilustra una inflación al rojo vivo que prepara el escenario para el inicio de las subidas de tipos de interés de la Reserva Federal (Fed) a partir de marzo.
El índice de precios al consumidor subió 7 por ciento en 2021, la mayor alza en 12 meses desde junio de 1982, según datos del Departamento de Trabajo publicados este miércoles. El indicador de inflación ampliamente seguido aumentó 0.5 por ciento desde noviembre, superando las previsiones.
Excluyendo los componentes volátiles de alimentos y energía, los llamados precios subyacentes se aceleraron respecto al mes anterior, aumentando 0.6 por ciento más de lo previsto. La medida saltó un 5.5 por ciento respecto al año anterior, el mayor avance desde 1991.
El aumento del IPC estuvo liderado por mayores precios de vivienda y vehículos usados. Los costos de los alimentos también contribuyeron. Los precios de la energía, que fueron un factor clave de la inflación durante la mayor parte de 2021, cayeron el mes pasado.
La cuesta de enero se percibe igual de complicada que el año pasado.
Los datos refuerzan las expectativas de que la Fed comenzará a subir las tasas de interés en marzo, un fuerte ajuste de política con respecto al cronograma proyectado hace solo unos meses.
La alta inflación ha demostrado ser más obstinada y generalizada de lo que predijo el banco central en medio de una demanda sin precedentes de bienes junto con limitaciones de capacidad relacionadas con el suministro de mano de obra y materiales.