¿Qué revolucionó la música pop? ¿Y cuándo sucedieron esas revoluciones musicales?
La respuesta a esas preguntas la buscó un grupo de académicos británicos que estudió científicamente ese género musical de los últimos 50 años y encontró que hubo tres revoluciones de estilo entre 1960 y 1910.
Los científicos, de las universidades londinenses Queen Mary e Imperial College, analizaron más de 17.000 canciones pop que integraron la lista US Billboard Hot 100, que recoge las melodías internacionales más populares.
Estudiaron distintas características de las canciones, como la armonía, los cambios de acordes, y los tonos de la música. Y después analizaron cómo cambiaron con el tiempo.
Y sus resultados fueron publicados en la revista científica Royal Society Open Science.
Primera revolución: 1964
A principios de los años 60 empezó a disminuir la presencia en las canciones de los llamados acordes de séptima dominante, presentes en el jazz y el blues.
Y en 1964, el año que marcó esta primera revolución identificada por los académicos, fue cuando tuvo lugar una «invasión» de grupos británicos en el panorama internacional.
Según los científicos, esto marcó la primera revolución de estilo en la música pop, entendiendo revolución como un periodo de cambios extremadamnete rápidos en las listas de lo más escuchado.
¿Qué sonaba? Bandas como los Beatles y los Rolling Stones introdujeron en la música un sonido rockero radicalmente nuevo.
Esta primera revolución dio paso a un incremento de los acordes mayores y a una creciente «agresión» con la guitarra y voces menos delicadas, según los investigadores.
Segunda revolución: 1983
El dúo británico Eurythmics, formado por Annie Lennox y David A. Stewart, fue muy popular en los 80. ¿Recuerdas el famoso «Sweet dreams are made of these?
Fueron las nuevas tecnologías, los sintetizadores, los sámplers y las cajas de ritmos los que propiciaron esta segunda revolución estilística.
Y 1983 el año en que tuvo lugar, según identificaron los científicos.
¿Qué sonaba? Artistas como Michael Jackson, The Police y Eurythmics encabezaban las listas en Estados Unidos en esta segunda época revolucionaria.
El exitoso «Sweet dreams are made of this», de Eurythmics, el dúo británico formado por Annie Lennox y David A. Stewart, salió a la venta en 1983.
Curiosamente el tecnopop que tanto caracterizó a los años 80, convivió a veces con el soul y el estilo afroamericano doo-wop, de Billy Joel, mientras sonaban temas como «all night long» de Lionel Richie, que incorpora influencias caribeñas al funk.
La tercera y «mayor» revolución: 1991
El auge del hip hop fue en parte impulsado por la popularidad del programa de MTV Yo!MTV Raps.
El año 1991, con la llegada a la música comercial del rap, el hip hop y otros géneros relacionados, fue el que marcó el inicio de la tercera revolución, según los resultados del estudio.
«La tercera revolución es la más grande», le explicó a la BBC el líder del estudio, Matthias Mauch, de la Queen Mary University of London.
«Esto fue muy claro en nuestro análisis, porque al observar la armonía, el rap y el hip hop no usan mucha armonía. El énfasis está en el sonido de la voz y el ritmo».
«Esto fue una verdadera revolución: de repente era posible tener una canción pop sin armonía».
El auge del hip hop fue en parte impulsado por la popularidad del programa de MTV Yo!MTV Raps. Así se acentuó el énfasis en los patrones de voz, se revivieron algunos ritmos funk de los 70 y desaparecieron las guitarras todopoderosas.
¿Qué sonaba? Como ejemplos típicos de 1991 los investigadores mencionan la música del rapero Busta Rhymes, Nas, y Snoop Dogg.
Triunfaban temas como este de rap, «Around the Way Girl», de LL Cool J, que fue numero 9 en la lista Billboard Hot 100 en 1991.
Sin embargo, la canción más vendida del año no tuvo nada que ver con estos estilos: fue «(Everything I Do) I Do It For You», de Bryan Adam.
Otros cambios más sutiles
Los investigadores dicen que algunos cambios musicales fueron mucho más lentos a la hora de entrar en las listas de los grandes éxitos, pero que aún así tuvieron un gran impacto.
«Los acordes de séptima menor fueron introducidos a través del funk, del soul y la música disco en los años 70», dijo Mauch.
«Eso no causó una revolución, pero estos acordes no estaban antes y desde entonces no han desaparecido. Canciones nuevas siguen utilizando mucho estos acordes», explicó.
Un año para olvidar y un mito desmontado
El dúo Pet Shop Boys en 1988.
1986 fue, según el estudio, el año menos diverso en las listas de éxito.
O en otras palabras, el más aburrido. Un hecho que los investigadores atribuyen a la popularización de las cajas de ritmos y los sámplers.
Fue ahí cuando triunfaba «West End Girls» de Pet Shop Boys y se escuchaban varios de los grandes éxitos de Janet Jackson.
En cuanto a la música rock, la batería inicial del tema de 1981 «In the air tonight» de Phil Collins fue copiada posteriormente por casi todas las banda de rock de la época.
Bruce Springsteen es uno de los representantes del «arena rock».
Según los investigadores, la llegada en 1980 del conocido en inglés como arena rock, el popular rock de los grandes estadios de artistas como Bon Jovi o Bruce Springteen, marcó una época en la que la música carecía de diversidad.
Sin embargo, los académicos aseguran que durante los 50 años analizados la música evolucionó constantemente y desmienten la idea de que la música pop está empezando a sonar toda igual.
«Mucha gente dice que la música está empeorando pero no encontramos evidencia de nada así. No hay una tendencia general a que la composición, los ingredientes musicales de las listas, se esté haciendo más sosa», dijo Matthias Mauch.
«Lo que sí es realmente fascinante es ver cómo esa diversidad ha ido cambiando».
Universidad de Harvard ofrecerá curso sobre Taylor Swift
Taylor Swift Créditos: Instagram Taylor Swift
Otra institución ha lanzado un programa que brinda un curso de siete semanas centrado en los derechos de autor y la propiedad intelectual, fundamentado en la carrera de Swift.
Nueva York.- La Universidad de Harvard se unirá a otras prestigiosas universidades de Estados Unidos que han integrado un nuevo curso en su currículo sobre la estrella del pop Taylor Swift.
«Taylor Swift and her world» (Taylor Swift y su mundo) ya ha atraído la atención de 300 estudiantes y es parte de una ola de interés en la cantante por parte de centros educativos, entre ellos las universidades de Nueva York, Texas y Arizona, a las que el próximo año se sumará Stanford, destaca el New York Times.
El curso en Harvard será impartido por la profesora Stephanie Burt, de 52 años, admiradora de la música de la artista country y pop.
«Hace diez o doce años, me di cuenta de que de todas las canciones que uno escuchaba en farmacias, aeropuertos, estaciones de autobuses y lugares públicos, había una que era mejor que todas las demás», comentó Burt al Times, refiriéndose al éxito «You belong to me».
«Quería saber quién la escribió. Era una canción más atractiva, lírica y musicalmente, simplemente una pieza de construcción perfecta», agregó.
La profesora indicó al diario que se interesó mucho más en Swift cuando vio el documental «Miss Americana», estrenado en 2020 y que sigue la vida de la cantante a lo largo de varios años de su carrera.
«Realmente hace un gran trabajo al mostrar cuánto apoyo ha tenido: ella es alguien que viene de privilegios y tuvo padres que realmente querían ayudarla a conseguir sus sueños, pero también cómo trabajó para convertirse en ella misma y cómo se ha convertido en alguien que toma sus propias decisiones de una manera que atrae a las personas hacia ella y no las aisla», comentó.
El interés por Taylor Swift es contagioso: el próximo año la Universidad de California en Berkeley tiene previsto ofrecer «Arte y espíritu empresarial: la versión de Taylor».
Mientras, la Universidad de Florida también ofrecerá un curso sobre la narrativa de la cantante y la descripción del mismo comienza con «¿Estás listo?» en referencia a la canción del álbum «Reputation»
Y este mes, la Universidad de Miami presentó un programa que ofrece, entre otros, un curso intensivo de siete semanas sobre los derechos de autor y propiedad intelectual basado en la carrera de Swift.