Los productores exportadores de aguacate de Jalisco apuestan a la diversificación del mercado externo, y el trabajo en el interno, como estrategia que han seguido por años, y que hoy les proporciona relativa tranquilidad ante la incertidumbre por las medidas de Donald Trump y la amenaza de la dilución del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
La semana pasada, un embarque de 100 toneladas de aguacate de Jalisco que sería introducido al mercado de Estados Unidos tuvo que ser redireccionado a Canadá y México debido a que no se concluyó el proceso de exportación.
Ignacio Gómez, director de la Asociación de Productores y Exportadores de Aguacate de Jalisco (Apeajal), explicó en entrevista para SinEmbargo que la cancelación se debió a que finalmente no se firmó un plan de trabajo necesario para la exportación, un documento robusto y complejo, en el cual, laboran desde el año anterior.
Desde 1997, Michoacán puede exportar aguacate a Estados Unidos; sin embargo, en mayo de 2016, Estados Unidos publicó un decreto en el que se aceptaba incluir municipios fuera de Michoacán dentro del programa de exportación. A partir de entonces los productores de Jalisco empezaron a trabajar con reuniones para adecuar y armar un nuevo programa de trabajo que regiría a todo el país, dijo Ignacio Gómez.
Se trata de un documento técnico que establece la función de cada una de las partes involucradas en la exportación: el productor, transportista, el que lleva la huerta, el empaque, la junta local. Dicho plan debe de estar firmando por ambos países, como parte del proceso de exportación, según explicó el empresario.
Fuente: ECONOMÍAHOY.MX