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México

Luisa Alcalde acusa gentrificación… pero construyó edificio sin permisos en la Roma

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Mientras Luisa María Alcalde, presidenta nacional de Morena, acusa gentrificación en alcaldías de oposición como Miguel Hidalgo, Cuauhtémoc y Benito Juárez, un reportaje reveló que ella misma desarrolló un edificio en la colonia Roma Sur —una de las zonas más impactadas por este fenómeno—, sin contar con todos los permisos requeridos.

En 2016, Alcalde adquirió una casa de dos niveles en esa colonia por 4.2 millones de pesos. Cuatro años más tarde, sobre ese predio construyó un edificio de cuatro niveles, a pesar de que la manifestación de construcción aprobada por la alcaldía Cuauhtémoc solo permitía tres niveles.

Desde 2020, el edificio es habitado por la propia dirigente de Morena, su hermana Bertha María —actual titular de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX— y un amigo cercano de ambas, Yamil Villarreal. Sin embargo, hasta la fecha no se ha presentado el aviso de terminación de obra, lo que significa que el inmueble no tiene autorización legal de uso ni ocupación.

El edificio cuenta con estacionamiento, tres departamentos y un lujoso roof garden equipado con jacuzzi, asadores y área de descanso, donde las hermanas y su círculo cercano han compartido imágenes en redes sociales.

Según documentos del Registro Público de la Propiedad y declaraciones patrimoniales, Luisa Alcalde adquirió la tercera parte del inmueble con una donación de 1.7 millones de pesos hecha por sus padres. Su hermana Bertha declaró en 2016 la compra de un departamento de 134 m², coincidente con la propiedad en cuestión.

Esta revelación ha generado críticas, ya que mientras desde Morena se señala la gentrificación en territorios panistas como un problema social, líderes del propio partido se benefician de desarrollos inmobiliarios sin cumplir con todos los requisitos legales.

México

México acordó con Estados Unidos liberar agua del Río Bravo desde el 15 de diciembre

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El Gobierno de México y Estados Unidos fortalecieron su cooperación para la gestión del agua en la cuenca del Río Bravo, tras varias semanas de negociaciones, y acordaron iniciar entregas de agua a partir del 15 de diciembre, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores mediante un comunicado.

Ambos países coincidieron en la importancia de cumplir con las obligaciones establecidas en el Tratado de Aguas de 1944, instrumento que regula la distribución del recurso hídrico y la administración de aguas compartidas entre las dos naciones. Como parte del acuerdo, México liberará un volumen de 249 mil 163 millones de metros cúbicos de agua para Estados Unidos, conforme a los términos del tratado.

La Secretaría de Relaciones Exteriores precisó que las entregas se realizarán dentro del marco legal vigente, respetando la disponibilidad hidrológica y los límites operativos establecidos, sin afectar el suministro de agua para consumo humano ni la producción agrícola en la región fronteriza.

El entendimiento se consolidó después de que el 8 de diciembre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reclamara a México el adeudo de agua correspondiente y advirtiera sobre la imposición de aranceles de 5 por ciento en caso de incumplimiento. Un día después, el 9 de diciembre, se llevó a cabo de manera virtual la quinta reunión binacional del año para dar seguimiento a las entregas y evaluar la situación técnica.

En dicho encuentro participaron funcionarios de alto nivel de ambos gobiernos. Por parte de México asistieron el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué; el subsecretario para América del Norte y encargado del despacho de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Roberto Velasco; y el titular de la Comisión Nacional del Agua, Efraín Morales. Por Estados Unidos participaron la secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, y el subsecretario de Estado, Christopher Landau.

El Tratado de Aguas de 1944 no solo contempla la entrega de agua, sino también la generación de energía eléctrica, el control de avenidas, obras de saneamiento del río Tijuana y la operación de las presas internacionales Falcón y La Amistad. Ambos gobiernos señalaron que han trabajado de manera coordinada para atender el ciclo actual y cubrir el déficit del ciclo anterior, conforme a lo establecido en el Artículo 4 del acuerdo.

Las autoridades destacaron la necesidad de mantener el diálogo técnico a través de la Comisión Internacional de Límites y Aguas y la International Boundary and Water Commission, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del recurso hídrico y la protección de la población y la agricultura frente a la sequía histórica. Con este acuerdo, México reiteró su compromiso con los tratados internacionales y la cooperación bilateral en materia de agua.

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