El canciller de México, Marcelo Ebrard, reiteró este martes el deseo de su país de poder comenzar a producir la vacuna rusa Sputnik V contra el coronavirus.
«México ya está envasando dos vacunas, CanSino y AstraZeneca, y nos gustaría mucho hacerlo con Sputnik», dijo Ebrard en entrevista con RT desde Moscú, donde se encuentra de visita desde el pasado domingo.
En la conversación detalló que, en busca de lograr este objetivo, sostendrá reuniones con representantes del Instituto Gamaleya, que desarrolló la vacuna, y el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF).
Además, el funcionario adelantó que el envasado en México de la Sputnik V sería en la farmacéutica estatal Birmex, que también está en conversaciones con las instituciones rusas.
México es uno de los principales países de Latinoamérica que ha adquirido la vacuna contra el covid-19 desarrollada en Rusia. Según informó Moscú, a la fecha se han enviado 900.000 dosis de Sputnik V a la nación norteamericana.
Ebrard también se refirió a estas cifras, señalando que los resultados «han sido muy buenos» y le dan a México «suficiente data» para pasar ahora al proceso de envasado en el país.
La vacunación en México
El canciller explicó que en México, al igual que en muchos otros países, «ha sido trágica la experiencia» por la pandemia, al mencionar que «muchas personas han perdido familiares, amigos, compañeros».
«México ya rebasó el 10 % del total de la población vacunada»
Ante ello, dijo: «Lo importante es que la vacunación avance para que podamos controlar la pandemia, en eso estamos ahorita». Así, detalló que actualmente «México ya rebasó el 10 % del total de la población vacunada» y esperan muy pronto llegar al 20 %.
De esta manera, estima que para 2022 ya un porcentaje muy alto de la población esté inmunizado. «No tienes que vacunar 100 %, pero sí suficientemente alto como para que la pandemia no sea un riesgo relevante», enfatizó.
«Hay razones para ser optimistas», remarcó, al indicar que nunca en la historia de la humanidad se había podido desarrollar una o varias vacunas tan rápido como se ha hecho ahora con los fármacos contra el covid-19, lo que considera un hecho «inédito».
El canciller mencionó que dentro de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), cuya presidencia pro tempore la ostenta México actualmente, se hizo una reunión el pasado 15 de abril sobre el portafolio de vacunas de América Latina.
Resaltó que Cuba tiene dos vacunas en fase 3, México una en fase 1 y Brasil, Argentina y Chile están por entrar a fase 1 con otros candidatos vacunales. El objetivo es que en 2022 se de preferencia a la opción que ya esté autorizada para su uso y aprovechar el fármaco en la región.
La migración hacia el norte
Ebrard también se refirió a los flujos migratorios, principalmente de Centroamérica, hacia EE.UU. y México.
Al respecto, aseguró que «el problema evidente es una situación económica muy mala en los países», que obliga a la gente a salir. Por ello, propuso hacer un esfuerzo común, tanto con EE.UU. como con otros países y organismos, para hacerle frente a este tema.
En este marco, confirmó que el próximo 7 de mayo el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, sostendrá una reunión virtual con la vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, quien fue designada por el mandatario Joe Biden para gestionar la crisis migratoria en la frontera sur estadounidense e impulsar el desarrollo en la parte norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador).
«El problema evidente de la migración es una situación económica muy mala en esos países»
Sobre ese encuentro, Ebrard detalló que México ha puesto sobre la mesa «dos proyectos específicos» en pro de que se haga «un esfuerzo de impacto inmediato».
El primero es que «se lance una inversión ambiental muy grande, que a la vez tiene un impacto relevante para que la gente tenga empleo»; mientras que el otro fue denominado «Jóvenes construyendo futuro», para que los jóvenes en zonas urbanas también tengan oportunidades en el corto plazo, indicó el canciller.
Con ello, buscan que «la gente no tenga que migrar por la razón forzada, la pobreza» y, además, hacer acciones para frenar los impactos negativos medioambientales en la región, mencionó.
Para conocer más a fondo las opiniones y posturas del canciller de México sobre estos y otros asuntos, les invitamos a ver la entrevista completa.
Anthony Joshua dejó en claro la diferencia entre un excampeón mundial y una celebridad convertida en boxeador. El británico venció por nocaut técnico a Jake Paul en el sexto asalto de un combate de peso completo celebrado la noche del viernes en Miami, una pelea que desde su anuncio generó polémica por el contraste de experiencia, tamaño y trayectoria entre ambos contendientes.
El enfrentamiento, pactado a ocho rounds profesionales, despertó críticas por los riesgos que implicaba para Paul, quien llegó con marca de 12 triunfos y una derrota frente a Joshua, dos veces campeón del mundo y con récord de 28 victorias y cuatro caídas. Sin embargo, contra la mayoría de los pronósticos, el estadounidense resistió más de lo esperado y logró extender la contienda hasta bien entrada la segunda mitad.
Desde el inicio, Paul optó por el movimiento constante y el amarre, una estrategia evidente para consumir tiempo y evitar los golpes de poder del británico. Joshua, por momentos impreciso y visiblemente frustrado, tardó en encontrar su distancia, aunque poco a poco fue imponiendo su físico y su alcance.
En el quinto episodio llegaron los primeros momentos realmente críticos para Paul. Joshua conectó combinaciones más limpias, provocó dos caídas y estuvo cerca de finalizar el combate, aunque su rival logró sobrevivir con esfuerzo y algo de teatralidad, incluso recurriendo a gestos provocadores hacia el británico.
El desenlace llegó en el sexto round. Joshua salió decidido, conectó una derecha contundente que envió a Paul a la lona y, tras reincorporarse en evidente mal estado, el estadounidense recibió un uppercut y una nueva derecha al mentón que obligaron al réferi a detener la pelea. Paul terminó con el labio inferior partido, pero consciente y sonriente, reconociendo el cierre inevitable.
Más allá del resultado, el combate dejó sensaciones encontradas. Para Joshua, la victoria confirmó su superioridad sin que el análisis técnico vaya mucho más allá. Para Paul, haber llegado al sexto asalto frente a un peso completo de élite fue visto por algunos como una muestra de valentía y por otros como una peligrosa puesta en escena.
El debate sobre este tipo de cruces seguirá abierto, pero en el ring no hubo discusión. La experiencia y el poder de Anthony Joshua marcaron el final.