Mario Delgado Carrillo no ha encontrado la manera de unir a todas las corrientes que integran Morena, al contrario, ha coadyuvado a la división, alejando al partido de las luchas del pueblo, coinciden militantes morenistas y analistas políticos, quienes plantean una renovación de la dirigencia rumbo a 2024 para conservar la Presidencia y el proyecto de la Cuarta Transformación.
“Mario, si no entiendes qué piensa el país de Morena, renuncia, no hay bronca; súmate a lo que puedes hacer y lo has hecho muy bien, defendiendo la contrarreforma energética (…) Salgamos de la trampa burocrática y dejemos la lucha interna del lado, no sirve para nada. Si levantamos la antena, veremos que la población dice que Morena no sirve, y la única respuesta es ir con el pueblo, a luchar por los derechos de los trabajadores, vamos a defender la Reforma Eléctrica, vamos a explicar qué es la Revocación de Mandato y vamos a que en las próximas elecciones no haya el método de encuestas”, sugirió Paco Ignacio Taibo II, director del Fondo de Cultura Económica (FCE), durante la sesión virtual del Consejo Nacional de Morena.
Al hacer una autocrítica de la situación del partido, el director del FCE cuestionó a Mario Delgado sobre la división y el desprestigió por el que atraviesa Morena.
“Mario, tengo que decirlo claro, ¿o tú ves un partido que yo no veo por ningún lado?, y vivo en contacto con la base social día tras días regalando libros, hablando con la gente, asistiendo a reuniones de base en las poblaciones más aisladas, y lo que dicen ahí, es ¿cuál partido, dónde está?”, cuestionó.
LA DIRIGENCIA DE MARIO
Delgado Carrillo asumió la dirigencia de Morena el 20 de octubre de 2020 mediante una encuesta resuelta por el Instituto Nacional Electoral (INE) ante la incapacidad del partido para elegir a su nuevo líder. Se impuso con un 58.6 por ciento de los apoyos frente al 41.4 por ciento que obtuvo Porfirio Muñoz Ledo, contra quien compitió en una campaña plagada de denuncias.
Por eso, el gran reto de Mario Delgado (Colima, 1972) era unir a Morena y ganar la mayoría de estados y escaños en la Cámara de Diputados en la pasada elección de junio. En términos reales, el partido logró ganar 11 de las 15 gubernaturas en juego, 19 congresos y la mayoría absoluta en la Cámara Baja, pero en la Ciudad de México, que había sido el gran bastión morenista, casi la mitad de sus habitantes votó por una opción diferente.
Aunque el resultado de la elección parece una victoria, analistas aseguran que el triunfo se debe más al peso que aún tiene Andrés Manuel López Obrador, que al liderazgo de Delgado, y por ello recomendaron a Morena encontrar su identidad y líderes que no dependan de la figura del Presidente.
“El resultado de Morena en la pasada elección es parte de la ola de popularidad de López Obrador, pero al partido le urge buscar su identidad, qué líderes va a tener, tener una vida independiente al Presidente. Si Morena no sabe plantear una identidad más allá del Presidente, puede tener problemas en 2024”, consideró Fernando Dworak, analista y consultor político independiente.
Fuente: SinEmbargo