Conecta con nosotros

Resto del mundo

Matan a Silvio Berlusconi… en una obra de arte

Published

on

ROMA, 29 de mayo.- Una estatua del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, hecha con resinas acrílicas, reposa en el interior de una urna de cristal y madera dorada a un centenar de metros del palacio Chigi, la sede del Gobierno de Italia, que en la actualidad ocupa el Ejecutivo tecnócrata de Mario Monti.

Este conjunto escultórico en pleno centro histórico de Roma recuerda a las figuras de los museos de cera y ha sido creado por los artistas italianos Antonio Garullo y Mario Ottocento, que pretendían recrear las señas de identidad que, a su juicio, representa el ideario de Berlusconi y la figura del ex primer ministro.

Era berlusconiana

El sueño de los italianos es el título de esta peculiar obra, que se inspira en el mausoleo de los dirigentes políticos comunistas Lenin y Mao, y que, según los autores, pretende invitar al público a una reflexión concienzuda de la era berlusconiana.

Según relataron hoy, este Berlusconi durmiente representa «la más profunda idea de italianidad» que se ha tenido durante alrededor de dos décadas dentro y fuera del país y que ha identificado durante años los conceptos Italia y Berlusconi.

«Millones de italianos se han identificado con el sueño de un Berlusconi triunfador», señalaron Garullo y Ottocento, que explicaron que el título de la obra se basa en las propias palabras del ex primer ministro, quien, parafraseando a Martin Luther King, dijo al llegar al poder en 1994 que representaba «el sueño de los italianos».

Además, según los autores de la obra -que son también la primera pareja homosexual reconocida en Italia- esa era una de las frases con las que Berlusconi se solía presentar en las fastuosas fiestas que marcaron el final de su mandato y por las que el político tiene pendiente una causa judicial por incitación a la prostitución.

El conjunto, que fue ideado en 2010 y terminado a finales de 2011, es una caja a modo de urna con una estatua de Berlusconi a escala real que parece dormir un sueño plácido con una sonrisa perpetua sobre un lecho de seda roja.

Cuidan el mínimo detalle

Los autores imaginan un Berlusconi con la corbata desabrochada; en la mano derecha, un ejemplar de la revista Una historia italiana, que el político envió en su día a las familias italianas y en el que publicitaba su trayectoria.

En alusión a la afición del ex primer ministro por el sexo, la mano izquierda está apoyada en cerca de la pernera del pantalón, que permanece desabrochado.

La obra viene rematada por las zapatillas de estar por casa con dos grandes Mickey Mouse con las que Garullo y Ottocento calzan al líder político del Pueblo de la Libertad para representar el «carácter de personaje de dibujos animados» que le atribuyen.

«Hemos querido dejar pasar una distancia mínima con la época final de Berlusconi», dijo Ottocento, que cree que es importante que el espectador tenga cierta distancia temporal con los últimos coletazos de la época de Berlusconi -que terminó en noviembre de 2011- para poder evaluar con plenitud el simbolismo de su creación.

Los dos autores tomaron la decisión de exponer en el Palacio Ferrajoli, cerca del Palacio Chigi, porque les pareció que una obra como la suya debía poder exhibirse junto al centro físico del poder político italiano para tener «simbolismo mayor», según señalaron.

«Este ciclo simbólico se cerraría con la visita del propio Berlusconi», declaró Ottocento, quien admitió sonriente que es «prácticamente imposible» que el antiguo primer ministro acuda a contemplar su «otro yo», expuesto .

Ottocento y Garullo anticiparon además que su proyecto actual es una escultura sobre el papa Benedicto XVI que seguirá la línea marcada por su «Berlusconi embalsamado», ya que su idea es continuar explorando el universo de las figuras más representativas del poder en Italia.

jrr

Clic para comentar

You must be logged in to post a comment Login

Leave a Reply

Resto del mundo

Los retos de la Inteligencia Artificial ante un verano muy caliente

Published

on

By

El término “invierno de la inteligencia artificial” fue introducido por Roger Schank y Marvin Minsky en 1984, en la convención anual de la Asociación Norteamericana de Inteligencia Artificial (AAAI).

En ese encuentro advertían acerca de un probable estancamiento en el ámbito de la IA, caracterizado por una merma en el financiamiento y el entusiasmo hacia esta disciplina. La metáfora vino inspirada por el “invierno nuclear” del que se hablaba durante la Guerra Fría ante el riesgo de ataques con bombas atómicas, para ilustrar un periodo de declive, luego de una etapa de elevadas expectativas, respecto a las capacidades de la inteligencia artificial.

Cambio de narrativa

La revolución de la inteligencia artificial(IA) está marcando un antes y un después en diversas actividades profesionales, redefiniendo roles y automatizando ciertas funciones, particularmente aquellas caracterizadas por su repetitividad o la gestión de extensos volúmenes de datos.

Un informe del Departamento de Educación del Gobierno británico publicado a finales de 2023 evaluaba los posibles efectos de la IA en el mercado de trabajo de Reino Unido, señalando las debilidades de algunos puestos de trabajo. Algunos ejemplos que se encuentran en la línea de fuego de esta transformación tecnológica son: analistas de datos, periodistas, personal de back office, agentes bursátiles y traders, auditores y contables, consultores y analistas económicos, asesores financieros y analistas de riesgos financieros, entre otros.

IA y enriquecimiento global

McKinsey Global Institute ha examinado el impacto de la inteligencia artificial en campos como la economía y las finanzas, con un enfoque particular en su influencia en el ámbito laboral.

Los resultados de la investigación sugieren que, a pesar de los desafíos asociados con su adopción y absorción, la IA tiene el potencial de generar una actividad económica adicional a nivel global de entre 2,6 y 4,4 miles de millones de dólares anuales. Por ejemplo, el PIB español en 2021 fue de 1,4 mil millones de dólares. Esto aumentaría a nivel global el impacto de la inteligencia artificial en la economía entre un 15 y un 40 %.

El panorama de la IA ha experimentado un cambio significativo en los últimos años, con un marcado incremento tanto en su adopción como en la inversión por parte de las organizaciones. Desde 2017, la implantación de la IA se ha duplicado y actualmente más de la mitad de las empresas dedican más del 5 % de sus presupuestos para digitalización a esta tecnología.

Valor añadido e innovación

Ante el imparable avance de la inteligencia artificial, es momento de encarar la realidad: la entrada de la inteligencia artificial a las empresas afectará al trabajo de las personas, que deben reinventar su lugar en el mercado de trabajo.

Hay que evitar la llegada del “invierno del trabajo”: la formación de valor añadido y la habilidad de pensar de manera innovadora, lo que llaman “pensar fuera de la caja”, ya no son meros complementos sino requisitos indispensables para no verse relegados en sus funciones.

La innovación y la ética deben ir de la mano en este nuevo escenario, pero, sin una dosis de creatividad y aporte único, el desarrollo humano y el crecimiento profesional corren el riesgo de estancarse.

Este cambio de paradigma no admite términos medios: o los trabajadores se mantienen evolucionando constantemente o se quedarán atrás.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto