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México

México protege la calidad del aguacate hass con un sensor inalámbrico

Un sensor inalámbrico inventado en México registra el número de golpes que sufre el aguacate hass durante los procesos de selección y empacado y la información que registra ayuda a proteger la calidad del fruto.

El sensor, un acelerómetro triaxialo o de tres ejes que registra y mide las vibraciones en los tres ejes (X, Y, Z) y tiene además forma de aguacate, es la herramienta que ayuda a evaluar en tiempo real dónde se golpea el fruto y con qué intensidad.

«Desde que el fruto es vaciado de la caja a una de las bandas (transportadoras) tarda en llegar a la tolva de empacado entre 4 y 5 minutos», explicó a Efe Juan Antonio Herrera González, del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap).

«Entonces, creemos que la velocidad de la banda es muy alta y a mayor velocidad, mayor número de impactos incluso rebotes», añadió.

El especialista precisó que «el punto clave es que el fruto, independientemente si se golpea de manera fuerte o débil, va acumulando golpes, lo cual afecta su calidad».

Herrera González consideró que el problema no es que el fruto viaje en una banda «sino que cuando cambia de banda, o pasa de rodillos (de metal o de PVC) a una banda, los golpes son muy fuertes».

Precisó que los primeros frutos que salen de las cajas a las bandas «son los primeros que caen y son los que sufren los mayores impactos porque los últimos caen sobre los demás frutos».

Un sensor inalámbrico inventado en México registra el número de golpes que sufre el aguacate hass durante los procesos de selección y empacado y la información que registra ayuda a proteger la calidad del fruto. Foto: EFE
El investigador recordó que el fruto del aguacate «es muy susceptible» a los daños externos y mecánicos ocurridos en la antes y después de la cosecha y el manejo durante estas etapas puede reducir su calidad si no es el adecuado.

Explicó que el contacto con otros frutos o contra distintas superficies «alteran la textura, color y sabor de la pulpa» ya que provocan la aceleración de su maduración desde el interior que, entre otras desventajas, acorta su vida y reduce su valor comercial.

«Los golpes en el fruto, quizás su principal desventaja, es algo que solo ve el consumidor al abrir el fruto», dijo Herrera González, quien contó que en muchos casos el fruto alcanza a cicatrizar por fuera, en la cáscara, «pero por dentro el daño ya se dio», apuntó.

Explicó que el sensor simula el recorrido de los frutos y evalúa con precisión los impactos o golpes y el sitio donde ocurren en tiempo real, lo cual sirve para realizar las correcciones necesarias como reemplazar cada cierto tiempo los «colchones» donde caen los frutos en la tolva de vaciado.

Según un estudio llevado a cabo por expertos del Inifap en distinta empacadoras, un aguacate recibe de 37 a 42 impactos durante la línea de selección y empacado.

Además, identificaron que la mayor cantidad de impactos de diferentes magnitudes sucede en el paso por los rodillos y cepillos, con 45 golpes en promedio.

En tanto, en la etapa de vaciado de frutos a la tolva de empacado suma seis o siete golpes, mientras que en la selección manual, cuando se alinea las frutas en filas, una por una y etiquetado, ocurrieron 14.9 impactos.

Aunque en la etapa de vaciado se registraron menos golpes en los frutos, estos fueron los de mayor intensidad durante todo el proceso.

Fuente: Vanguardia

México

Pone ‘El Mayo’ ultimátum: me repatrian o el colapso

Ismael «El Mayo» Zambada, líder de Cártel de Sinaloa, exigió al Gobierno de México que reclame a Estados Unidos su repatriación porque, de no hacerlo, la relación entre los dos países sufrirá un «colapso».

Juan Manuel Delgado González, asesor jurídico de Zambada en México, confirmó que la petición fue presentado ayer en el Consulado General de México en Nueva York un escrito al que tuvo acceso Grupo Reforma y donde Zambada exige que lo defienda el gobierno.

Debe intervenir (el gobierno) a fin de que el presente asunto no resulte en un colapso en la relación bilateral entre ambos países, puesto que no se debe de perder de vista la irregular e ilegal manera en que el suscrito fui puesto a disposición de las autoridades de los Estados Unidos de América».

En julio del 2024, Zambada fue engañado por Joaquín Guzmán López, hijo de «El Chapo» Guzmán, fue secuestrado para llevarlo a Texas donde enfrenta cargos por delincuencia organizada, homicidio, narcotráfico en gran escala y lavado de dinero, entre otros.

En la solicitud de asistencia consular, el capo señala que si no se interviene en favor de sus derechos, políticos y funcionarios mexicanos también pueden ser secuestrados y trasladados ilegalmente al país vecino.

Por lo anterior, expresa que la respuesta del Estado mexicano «no es opcional», porque tiene la obligación ineludible de defenderlo.

«Si el Gobierno de México no actúa, el suscrito seré condenado a pena de muerte sin lugar a ninguna duda y además esto constituirá un precedente peligroso que permitiría que en cualquier momento cualquier gobierno extranjero pudiera de manera impune violentar nuestro territorio y soberanía, interviniendo para la detención de cualquier persona, incluso políticos o funcionarios del Gobierno, para ser trasladados a la jurisdicción norteamericana sin que nada suceda», manifiesta.

«Exijo y demando que el Estado mexicano cumpla con su obligación ineludible de intervenir de manera inmediata, contundente y sin margen de discrecionalidad para exigir formalmente a los Estados Unidos de América garantías y seguridades absolutas, plenas, vinculantes e irrevocables de que no se me impondrá ni se ejecutará la pena de muerte en su jurisdicción. Esta exigencia no es opcional, ni puede ser interpretada como una cuestión de oportunidad política o diplomática».

El documento firmado por Zambada advierte que, de no haber una exigencia categórica y formal de sus garantías, «constituiría una traición al sistema jurídico mexicano» y al deber del Estado de garantizar la seguridad de sus ciudadanos, sin excepción alguna.

«En este contexto, en cuanto hace a mi asunto en particular, resulta una obligación del Estado Mexicano: presentar una protesta formal ante las autoridades estadounidenses, señalando la violación del Tratado (de México y Estados Unidos para prohibir los secuestros transfronterizos) y exigiendo el respeto a la soberanía mexicana y al debido proceso legal», señala.

Solicitar la repatriación inmediata de mi persona, argumentando que mi traslado fue ilegal y que cualquier proceso judicial en mi contra debe llevarse a cabo en México, conforme a las leyes nacionales y los acuerdos internacionales vigentes».

En una parte de su escrito, el líder del Cártel de Sinaloa requiere al Gobierno de México para que pida a los estadounidenses un informe detallado de las circunstancias de su secuestro y traslado, identificando quiénes permitieron su entrada a la Unión Americana y bajo qué base legal.

También, que le informen la identidad de las personas involucradas en su traslado, tanto del lado estadounidense como del lado mexicano.

La razón por la que alega que el Gobierno federal debe exigir la cancelación del proceso al que está sometido en Nueva York, es precisamente porque el procedimiento tiene como origen su secuestro y traslado ilegal a la Unión Americana.

«Esta exigencia no es una cuestión discrecional ni sujeta a consideraciones políticas o diplomáticas», dice.

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