«Nada impide» que Washington complete el cupo de los empleados de su Embajada en Moscú con los titulares de pasaportes estadounidenses, en vez de limitar los servicios. Así ha respondido la Cancillería rusa a la decisión de la misión diplomática de EE.UU. de suspender la tramitación de visados no inmigrantes no destinados a viajes diplomáticos, después de que Moscú le prohibiera emplear a ciudadanos extranjeros.
En un mensaje en su canal de Telegram, el Ministerio de Exteriores indica que, «a simple vista», la decisión de la Embajada «parece una manifestación del arcaísmo y de la ineficacia» de los servicios consulares y diplomáticos estadounidenses.
«Como razón se indica la reducción forzosa de ‘personal local’. Sería más fácil decir: no sabemos y no queremos trabajar«, enfatiza el mensaje, que recuerda que ya antes de la decisión estadounidense, los servicios de expedición de visados se completaban «con meses de demoras».
«¿Qué tipo de trabajo están haciendo?»
Por otro lado, debido a la desproporción que favorece al personal de las misiones estadounidenses en Rusia en comparación con sus contrapartes rusas en EE.UU., y al «bloqueo completo del trabajo consular adecuado en nuestro país» en los últimos años, «se hace evidente» que los socios estadounidenses «no solo se dedicaban al trabajo diplomático y consular«, enfatiza el departamento, que lanza la pregunta: «Entonces, ¿qué tipo de trabajo están haciendo?».
- Según anunció la Embajada estadounidense, a partir del próximo 12 de mayo solo prestará los servicios de emergencia para ciudadanos de EE.UU. —posiblemente, con retrasos o limitaciones— y tramitará «un número muy limitado» de visas de inmigrantes.
- Además, la misión diplomática recomienda encarecidamente a los ciudadanos estadounidenses que se encuentren en Rusia con visas vencidas que abandonen el país antes del 15 de junio, cuando expira el decreto que suspende las deportaciones de los extranjeros y apátridas debido a la pandemia.