Conecta con nosotros

Resto del mundo

Niega presidente de Francia asilo a Assange

El fundador de Wikileaks, Julian Assange, quien este viernes cumplió 44 años de edad, recibió otra negativa de asilo, ahora de parte del presidente francés, Francois Hollande.

En una carta abierta publicada en el diario galo ‘Le Monde’, Assange solicitó refugio a Hollande. “Mi vida ahora está en peligro, señor presidente, y mi integridad, tanto física como psicológica, cada día que pasa, se ve un poco más amenazada”, argumentó.

Y añadió: “Señor Hollande, deme bienvenida en Francia”.

La respuesta del presidente Hollande fue inmediata. En un breve comunicado, de dos párrafos, difundido este viernes por el Palacio del Elíseo, Hollande, una de las víctimas del espionaje de Estados Unidos, según Wikileaks, respondió que “Francia no puede aceptar su demanda”.

El jefe de Estado explicó que su decisión fue tomada “teniendo en cuenta un examen profundo de elementos jurídicos y de la situación material” de Assange que facilitó a dos medios de comunicación franceses los documentos que prueban que tres presidentes franceses, entre ellos Hollande, fueron espiados.

Hollande justificó su decisión con el argumento de que “la situación del señor Assange no representa un peligro inmediato”.

Y añadió además que el fundador de WikiLeaks, refugiado desde hace tres años en la embajada de Ecuador en Londres, tiene vigente una orden de detención europea por el presunto delito de abuso sexual.

Assange argumenta que dichas acusaciones son falsas y que son un mero pretexto para extraditarlo a Estados Unidos.

La carta del fundador de Wikileaks se da a conocer días después de la revelación de documentos denominada ‘Espionnage Élysée’, en el marco de la cual el portal WikiLeaks publicó informaciones ultrasecretos sobre el espionaje de Estados Unidos contra Francia.

Proceso

Resto del mundo

Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.

Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.

En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.

Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.

Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.

 

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto