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Nueva política eléctrica acelera el cambio climático : Expertos

La política en materia de generación de energía eléctrica publicada el viernes por la Secretaría de Energía (Sener), acelera el cambio climático, va en contra de los compromisos nacionales e internacionales asumidos por México en la reducción de emisión de gases de efecto invernadero y cierra el paso a las energías renovables, ofreciendo como alternativa la quema inaceptable de combustóleo para generar electricidad, advirtieron representantes de varias organizaciones.

En videoconferencia conjunta, con Jorge Villarreal de la Iniciativa Climática de México (ICM), Stephan Brodziak de El Poder del Consumidor y Anaid Velasco del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda); Pablo Ramírez, Especialista en Energía y Cambio Climático de Greenpeace México, advirtió que la Política de Confiabilidad, Seguridad, Continuidad y Calidad del Sistema Eléctrico Nacional, dada a conocer en una edición vespertina del Diario Oficial de la Federación el pasado viernes 15 de mayo, implica graves riesgos ambientales.

Recordó que México asumió el compromiso internacional, que luego convirtió en ley, de generar 35 por ciento de su electricidad a partir de fuentes renovables para el 2024.

Sin embargo con la Política recién publicada y el Acuerdo que se emitió el 29 de abril en la misma línea, señaló que esta meta se ve imposible de alcanzar, porque se privilegian energías fósiles para producir electricidad y se le cierra el paso a las renovables, con el pretexto de que son inestables.

“La política climática del actual gobierno tiene implicaciones severas en varios aspectos. En el medio ambiente, se puede augurar que no se cumplirán las metas climáticas de llegar a cero emisiones en 2050. Además, quemar combustóleo, como se propone, tendrá serios impactos en la salud de las personas, sobre todo en quienes viven en áreas colindantes a las termoeléctricas y en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México, así como otras cuencas densamente pobladas”, expresó Pablo Ramírez, Especialista en Energía y Cambio Climático de Greenpeace México.

Por último, resaltó que se tendrán implicaciones económicas ya que generar electricidad con combustóleo es más caro que con energía eólica o fotovoltáica. El aumento de los costos tendrá como consecuencia previsible un incremento en las tarifas de electricidad o de los impuestos, sin descartar recortes en áreas prioritarias como salud y educación.

“Es preocupante no solo el estancamiento de las energías renovables, sino el retroceso en cuanto al uso de combustibles descontinuados y prohibidos en el mundo como el combustóleo; estas decisiones tendrán implicaciones muy graves en términos de salud, ambientales y económicos, debido a la ineficiencia y alto costo en los procesos de generación. No podemos seguir quemando combustóleo para generar electricidad y cerrando la puerta a alternativas renovables que deben enmarcarse dentro del respeto a los derechos humanos”, advirtió Pablo.

Por otra parte, dijo, esta nueva política y también el Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional 2019-2033, parecen enfocarse a “ajustar cuentas” con la Reforma Energética del anterior gobierno y hace imposible el desarrollo de fuentes de energía renovable, con la consecuente caída de inversiones extranjeras directas, como ya denunciaron los embajadores de Canadá y de la Unión Europea en México.

Stephan Brodziak, de El Poder del Consumidor, enfatizó que las medidas tomadas por la Sener son contraproducentes para enfrentar la emergencia sanitaria por Covid-19.

“Al limitar la participación de las energías renovables en el despacho de energía eléctrica se tendrá que aumentar el uso del combustóleo para la generación eléctrica, con ello aumentarán considerablemente las emisiones de varios contaminantes que afectan gravemente la salud de la población, siendo las enfermedades respiratorias (generados por estos contaminantes) una de las causas más importantes de comorbilidad en las muertes por Covid-19. Además, dichas emisiones afectan el medio ambiente y hace casi imposible cumplir con nuestras metas de cambio climático adquiridas en el Acuerdo de París”, expresó Stephan.

Anaíd Velasco, del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), advirtió que la Política publicada el viernes adolece de violaciones de forma y de fondo.

“Por una parte, viola el procedimiento de mejora regulatoria pues su publicación ignora el derecho a la participación social que por ley debería hacerse para este tipo de actos. Por otra parte, en cuanto al fondo, transgrede importantes derechos humanos, entre ellos los derechos al medio ambiente sano y a la salud, pues al favorecer el uso de fuentes fósiles incrementa el deterioro ambiental que pone en riesgo la vida de las personas, además de incumplir con las metas internacionales de cambio climático”, señaló Anaid.

Jorge Villarreal, de Iniciativa Climática de México (ICM) dejó claro que en México no cabe más el combustóleo debido a que su uso energético en las termoeléctricas afecta directamente al medio ambiente y a la salud pública.

“Cada año hay miles de muertes asociadas a la exposición de partículas emitidas por las plantas termoeléctricas. Los proyectos de energías renovables, en distintas escalas, deben realizarse con pleno respeto al marco de los derechos humanos, incluidos los derechos de las comunidades. Éstas nos dan la mejor oportunidad para garantizar un desarrollo sostenible porque permiten abastecer nuestras necesidades energéticas sin contaminar, atender la pobreza energética presente en un tercio de todos los hogares del país, y reducir emisiones de gases de efecto invernadero para cumplir con nuestros compromisos internacionales en la materia”, agregó Jorge.

Las organizaciones coincidieron en que la nueva Política contiene defectos en los aspectos ambiental, social, económico, de salud y legal, por lo que no se descarta combatirla ante tribunales.

Fuente: Aristegui Noticias

México

Pone ‘El Mayo’ ultimátum: me repatrian o el colapso

Ismael «El Mayo» Zambada, líder de Cártel de Sinaloa, exigió al Gobierno de México que reclame a Estados Unidos su repatriación porque, de no hacerlo, la relación entre los dos países sufrirá un «colapso».

Juan Manuel Delgado González, asesor jurídico de Zambada en México, confirmó que la petición fue presentado ayer en el Consulado General de México en Nueva York un escrito al que tuvo acceso Grupo Reforma y donde Zambada exige que lo defienda el gobierno.

Debe intervenir (el gobierno) a fin de que el presente asunto no resulte en un colapso en la relación bilateral entre ambos países, puesto que no se debe de perder de vista la irregular e ilegal manera en que el suscrito fui puesto a disposición de las autoridades de los Estados Unidos de América».

En julio del 2024, Zambada fue engañado por Joaquín Guzmán López, hijo de «El Chapo» Guzmán, fue secuestrado para llevarlo a Texas donde enfrenta cargos por delincuencia organizada, homicidio, narcotráfico en gran escala y lavado de dinero, entre otros.

En la solicitud de asistencia consular, el capo señala que si no se interviene en favor de sus derechos, políticos y funcionarios mexicanos también pueden ser secuestrados y trasladados ilegalmente al país vecino.

Por lo anterior, expresa que la respuesta del Estado mexicano «no es opcional», porque tiene la obligación ineludible de defenderlo.

«Si el Gobierno de México no actúa, el suscrito seré condenado a pena de muerte sin lugar a ninguna duda y además esto constituirá un precedente peligroso que permitiría que en cualquier momento cualquier gobierno extranjero pudiera de manera impune violentar nuestro territorio y soberanía, interviniendo para la detención de cualquier persona, incluso políticos o funcionarios del Gobierno, para ser trasladados a la jurisdicción norteamericana sin que nada suceda», manifiesta.

«Exijo y demando que el Estado mexicano cumpla con su obligación ineludible de intervenir de manera inmediata, contundente y sin margen de discrecionalidad para exigir formalmente a los Estados Unidos de América garantías y seguridades absolutas, plenas, vinculantes e irrevocables de que no se me impondrá ni se ejecutará la pena de muerte en su jurisdicción. Esta exigencia no es opcional, ni puede ser interpretada como una cuestión de oportunidad política o diplomática».

El documento firmado por Zambada advierte que, de no haber una exigencia categórica y formal de sus garantías, «constituiría una traición al sistema jurídico mexicano» y al deber del Estado de garantizar la seguridad de sus ciudadanos, sin excepción alguna.

«En este contexto, en cuanto hace a mi asunto en particular, resulta una obligación del Estado Mexicano: presentar una protesta formal ante las autoridades estadounidenses, señalando la violación del Tratado (de México y Estados Unidos para prohibir los secuestros transfronterizos) y exigiendo el respeto a la soberanía mexicana y al debido proceso legal», señala.

Solicitar la repatriación inmediata de mi persona, argumentando que mi traslado fue ilegal y que cualquier proceso judicial en mi contra debe llevarse a cabo en México, conforme a las leyes nacionales y los acuerdos internacionales vigentes».

En una parte de su escrito, el líder del Cártel de Sinaloa requiere al Gobierno de México para que pida a los estadounidenses un informe detallado de las circunstancias de su secuestro y traslado, identificando quiénes permitieron su entrada a la Unión Americana y bajo qué base legal.

También, que le informen la identidad de las personas involucradas en su traslado, tanto del lado estadounidense como del lado mexicano.

La razón por la que alega que el Gobierno federal debe exigir la cancelación del proceso al que está sometido en Nueva York, es precisamente porque el procedimiento tiene como origen su secuestro y traslado ilegal a la Unión Americana.

«Esta exigencia no es una cuestión discrecional ni sujeta a consideraciones políticas o diplomáticas», dice.

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