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Papa Francisco acepta renuncia de tres obispos de Chile tras escándalo de abusos sexuales

Como consecuencia de la crisis por los abusos que sacude en sus cimientos a la Iglesia católica chilena, el Papa Francisco aceptó hoy las renuncias de tres obispos de ese país, entre ellos el cuestionado Juan Barros Madrid de la diócesis de Osorno.

Según informó la sala de prensa del Vaticano, el pontífice también acogió las dimisiones del arzobispo de Puerto Montt, Cristián Caro Cordero, y de Valparaíso, Gonzalo Duarte García de Cortázar.

Para ninguna de estas diócesis eligió un sucesor fijo, en todos los casos el líder católico designó administradores apostólicos “sede vacante et ad nutum Sanctae Sedis”, es decir “por sede vacante y hasta que la Santa Sede lo determine”.

Se trata de las primeras renuncias que Jorge Mario Bergoglio acepta luego que todos los obispos de Chile, en bloque, las presentaron el 17 de mayo pasado, luego de tres días de reuniones con el pontífice para analizar la crisis por los abusos de poder, de conciencia y sexuales de las últimas décadas, en la Iglesia de ese país.

El Papa reconoció públicamente que en Chile se ha dado una “cultura del abuso” y un “sistema de encubrimiento”, producto de una cultura elitista, de un arraigado clericalismo y de una pérdida del sentido espiritual en muchas instituciones católicas.

Ante el demoledor diagnóstico, presentado esos días por Francisco, los prelados decidieron poner sus puestos a disposición para permitirle decidir sobre el futuro de cada uno. Desde entonces, existía una gran expectativa por saber cómo respondería él.

Entre los primeros desplazados destaca Barros, el pupilo preferido de Fernando Karadima, el más famoso de los sacerdotes abusadores, poderoso y fascinante clérigo, durante años párroco del templo de Providencia, en el acomodado barrio “El Bosque” de Santiago.

En 2011, Karadima fue hallado culpable de abusos sexuales contra menores por el Vaticano y condenado a una vida de penitencia, alejado de todo ministerio público. No obstante, Barros siguió en su función episcopal sin mayores problemas.

Las víctimas más conocidas de los abusos de Karadima, James Hamilton, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo, acusaron a Barros de ser cómplice y de haber, incluso, asistido personalmente a algunos de los abusos.

Pese a ello, el Papa lo designó como obispo de Osorno en 2015, desencadenando una crisis pública para la Iglesia chilena nunca antes vista. Debieron pasar tres años antes que Francisco descubriese que había sido engañado y que Barros sí estaba relacionado con los abusos, como señalaban diversas fuentes.

Bergoglio cayó en cuenta de la realidad durante su visita apostólica de enero pasado a Chile, donde incluso llegó a defender públicamente al obispo Barros argumentando que no había “evidencias” en su contra y que todo era, más bien, producto de “calumnias”.

A su regreso a Roma, envió a dos hombres de su confianza (Charles Scicluna y Jordi Bertomeu) en una misión investigativa a Santiago de Chile y tras entrevistar a 64 testigos, ellos le entregaron un informe de dos mil 600 páginas que consignaba no sólo no sólo el involucramiento de Barros, sino -sobre todo- la grave crisis producto de casos de abuso en diversas diócesis del país.

Así, el 8 de abril, el propio pontífice decidió pedir perdón por sus “graves equivocaciones” al analizar el problema y las atribuyó a una “falta de información veraz”, esto en una carta enviada a los miembros de la conferencia episcopal, en la cual los convocó de urgencia al Vaticano.

Antes de la comparecencia de todos los obispos en Roma, el Papa decidió recibir en privado y pedirles perdón personalmente a Hamilton, Cruz y Murillo, a quienes hospedó directamente en su residencia, la Casa Santa Marta.

Luego, anunció que tomaría medidas de corto, mediano y largo plazo, para recuperar la comunión y la credibilidad perdidas.

Al recibir este lunes las renuncias de los tres obispos, el líder católico designó como administrador para Puerto Montt a Ricardo Basilio Morales Galindo, superior provincial de la Orden de los Mercedarios en Chile.

Luego designó a los obispos auxiliares de Santiago de Chile, Pedro María Ossandón Buljevic y Jorge Enrique Concha Cayuqueo, como responsables temporales, respectivamente, de las diócesis de Valparaíso y Osorno.

Resto del mundo

Donald Trump ordenó paralizar toda la ayuda militar a Ucrania

El presidente Donald Trump ordenó el lunes una “pausa” en la asistencia estadounidense a Ucrania después de la reunión en la Oficina Oval del viernes, mientras Trump busca presionar al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky para que entable conversaciones de paz con Rusia.

Un funcionario de la Casa Blanca dijo que Trump está concentrado en alcanzar un acuerdo de paz para poner fin a la guerra de más de tres años desatada por la invasión total de Ucrania por parte de Rusia, y quiere que Zelensky se “comprometa” con ese objetivo. El funcionario agregó que Estados Unidos estaba “deteniendo y revisando” su ayuda para “asegurarse de que está contribuyendo a una solución”. El funcionario habló bajo condición de anonimato para poder hablar sobre la asistencia.

Trump criticó el lunes al presidente ucraniano por sugerir que el fin de la guerra de Rusia contra Ucrania probablemente “está todavía muy, muy lejos”.

Los comentarios se producen mientras aliados destacados de Trump intensifican la presión sobre Zelensky para que cambie drásticamente su enfoque hacia el presidente estadounidense, quien ha hecho del fin rápido de la guerra una de sus principales prioridades, o se haga a un lado.

La larga y complicada relación entre los líderes ha llegado a su punto más bajo después de una desastrosa reunión en la Casa Blanca en la que Trump y el vicepresidente JD Vance criticaron a Zelensky por no estar lo suficientemente agradecido por el apoyo de Estados Unidos a Ucrania desde que el presidente ruso Vladimir Putin ordenó la invasión en febrero de 2022.

“Esta es la peor declaración que Zelensky podría haber hecho, ¡y Estados Unidos no la tolerará por mucho más tiempo!”, dijo Trump en una publicación en su plataforma Truth Social sobre los comentarios que Zelensky hizo el domingo por la noche mientras hablaba con periodistas en Londres.

El presidente de Ucrania Volodymyr
El presidente de Ucrania Volodymyr Zelensky sale de la Casa Blanca después de reunirse con el mandatario Donald Trump, el viernes 28 de febrero de 2025, en Washington (AP Foto/Jose Luis Magana)

Más tarde el lunes, en un evento en la Casa Blanca, Trump se refirió a los presuntos comentarios de Zelensky y afirmó que el líder ucraniano “mejor no tenga razón en eso”.

“Si alguien no quiere llegar a un acuerdo, creo que esa persona no durará mucho”, añadió Trump. “No se le escuchará por mucho tiempo”.

Trump se mostró en desacuerdo con Zelenskyy, quien sugirió que tomaría tiempo llegar a un acuerdo para poner fin a la guerra. El líder ucraniano también intentó ofrecer una visión positiva de la relación entre Estados Unidos y Ucrania tras la reunión de la Casa Blanca de la semana pasada.

Cuando un periodista le preguntó sobre las líneas generales de una nueva iniciativa europea para poner fin a la guerra en Rusia, Zelensky respondió: “Hoy estamos hablando de los primeros pasos y, por lo tanto, hasta que no estén en el papel, no me gustaría hablar de ellos en gran detalle”.

“Un acuerdo para poner fin a la guerra está todavía muy, muy lejos, y nadie ha iniciado todavía todos esos pasos”, añadió.

Pero Trump se irritó aún más cuando Zelensky sugirió que tomará tiempo para que el conflicto llegue a su fin.

“Es lo que estaba diciendo, este tipo no quiere que haya paz mientras tenga el apoyo de Estados Unidos y Europa, en la reunión que tuvieron con Zelensky, declaró rotundamente que no pueden hacer el trabajo sin Estados Unidos. Probablemente no haya sido una gran declaración en términos de una demostración de fuerza contra Rusia”, agregó Trump en su publicación. “¿En qué están pensando?”

Zelensky recurrió a las redes sociales poco después de las últimas críticas de Trump. No se refirió directamente a los comentarios de Trump, pero subrayó que “es muy importante que intentemos que nuestra diplomacia sea realmente sustantiva para poner fin a esta guerra lo antes posible”.

“Necesitamos una paz verdadera y los ucranianos son los que más la desean, porque la guerra está destruyendo nuestras ciudades y pueblos”, añadió Zelensky. “Estamos perdiendo a nuestro pueblo. Necesitamos detener la guerra y garantizar la seguridad”.

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