El insomnio, revelado por su cuñado, difícilmente coincide con las informaciones que aluden a que el autor de ‘Purple rain’ llevaba semanas tomando altas dosis de un opiáceo.
Prince estuvo 154 horas despierto antes de morir, pese a estar tomando analgésicos que producen somnolencia, según información facilitada a la Policía y de la que se hace eco el diario inglés, Daily Mirror.
Poco después de que la familia del cantante celebrara una ceremonia en la intimidad en su domicilio, tras la incineración, su cuñado, Maurice Phillips, ha revelado que llevaba sesis días y medio sin dormir antes de que su cuerpo sin vida fuera encontrado en un ascensor en su domicilio de Paisley Park en Chanhassen (Minnesota).
Phillips, casado con Tyka Nelson, hermana de Prince, dijo al «Mirror»: Estuve con él el fin de semana pasado. Trabajó 154 horas seguidas. Era un buen cuñado. De hecho, sus amigos temen que el artista hubiera recibido recetas de un médico poco fiable.
Sin embargo, el insomnio revelado por su cuñado difícilmente coincide con las informaciones que aluden a que el autor de ‘Purple rain’ llevaba semanas tomando altas dosis de un opiáceo llamado ‘Percocet’, causa última, según parece, de la sobredosis que sufrió a bordo de su avión privado y que le llevó a ser ingresado de urgencia, tras un aterrizaje de emergencia.
Entretanto, las circunstancias de la muerte del genio de Minneapolis siguen sin conocerse. El sheriff del condado de Carver, Jim Olson, no aportó grandes claves en la rueda de prensa que dio el viernes. Aseguró que no había signos de violencia en el cuerpo de Prince y que no había razones para creer que hubiera sido un suicidio. Pero se comprometió a llevar la investigación sobre su muerte hasta el final «para asegurarnos de que el público sabe lo que ocurrió».