Por unanimidad, la LXIV Legislatura del Congreso de Hidalgo aprobó con 25 votos a favor, el dictamen de ley contra la discriminación laboral de personas que cuenten con tatuajes o perforaciones corporales.
Durante la lectura del dictamen, el vocal de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, Crisóforo Rodríguez Villegas, informó que la ley en vigor señala que para el estado de Hidalgo la discriminación es toda conducta activa u omisiva que en forma de preferencia, distinción, exclusión, repudio, desprecio, rechazo o restricción, dirigida a una persona o grupo, basada en su origen o identidad indígena o nacional, sexo o género.
La discriminación es también cuando el rechazo es por la edad, discapacidad, condición social o económica, condición de salud, embarazo, lengua, religión, opiniones, preferencia sexual, estado civil, identidad política, apariencia física, y forma de vestir”, señaló.
Asimismo “por actuar, gesticular, tener tatuajes o perforaciones corporales”.
La reforma considera que los tatuajes y las perforaciones son ya algo actual o moderno, además de ser una costumbre milenaria que está llena de significados religiosos, culturales, mágicos, a lo que hoy en día la popularidad de los tatuajes y perforaciones ha ido en aumento.
También señala que datos de la Secretaría de Salud revelan que “a nivel nacional, cada año se tatúan más de 30 mil jóvenes; lo que antes se consideraba tabú, ahora es visible en cualquier localidad, en términos globales se estima que, en México una de cada 10 personas tiene al menos un tatuaje y en general, la cifra total de quienes han decidido marcar su cuerpo, podría llegar a 12 millones de personas”.
Lo grave del caso, añadió el legislador, es cuando a los tatuajes se les vincula con enfermedades transmisibles por contacto sexual, lo cual ha generado un clima de rechazo social, principalmente en el entorno laboral.
Excelsior