La iniciativa de reforma judicial enviada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, que entre otras medidas busca que jueces y magistrados sean electos por voto popular y la creación de un Tribunal de Disciplina Judicial, fue aprobada en lo general por la Cámara de Diputados esta mañana.
Después de 72 oradores que emitieron su posicionamiento, los legisladores avalaron la propuesta con 359 votos a favor, 135 en contra y 0 abstenciones; esto es más de las dos terceras partes de votos necesarias para modificar la Constitución. Siguiendo el procedimiento legislativo, la iniciativa será discutida en lo particular y después pasará al Senado.
Se prevé que en la tercera semana de septiembre sea enviada a los congresos locales y que en la última semana del mes regrese al Presidente López Obrador para su promulgación y publicación en el Diaro Oficial de la Federación.
El debate de la iniciativa presidencial transcurrió con cierto caos, luego de que las bancadas de Morena, PT y PVEM se atrincheraron e improvisaron la discusión en un lugar alternativo al palacio legislativo de San Lázaro, con la presencia de los diputados del PRI, PAN y MC, quienes se hicieron escuchar con protestas y lonas con la leyenda “Sin justicia no hay igualdad”.
En la discusión, los guindas aseguraron que la reforma es una petición de la ciudadanía que les dio la mayoría. En contraste, la oposición denunció una reforma malhecha, producto de la venganza contra el Poder Judicial, que no sucumbió al Ejecutivo.
La sesión en la Cámara Baja se realizó, pese a las tres suspensiones contra la discusión de la iniciativa, la última emitida ayer por Martha Magaña López, jueza Quinto de Distrito en el Estado de Morelos, y de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación se sumó a la suspensión de actividades que trabajadores del Poder Judicial comenzaron hace casi dos semanas.