Genaro García Luna, el ex secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) podría lejos de ver la luz del túnel. Mientras en México crece la lista de funcionarios señalados de tener nexos con el narco, Estados Unidos avanza en el juicio del ex jefe de la policía.
Tras la detención de García Luna en Dallas, Texas, la justicia estadounidense puso en la mira el aparato de seguridad del gobierno panista, y acusó a subalternos del ex secretario, entre ellos Iván Reyes Arzate, ex comandante de la Policía Federal y pieza clave en la red de narcotráfico y corrupción encabezada por García Luna.
A principios del mes pasado, la defensa de Reyes Arzate envió un documento al juez Brian Cogan, que sentenció a cadena perpetua a Joaquín el Chapo Guzmán, en el que acordaba una declaratoria de culpabilidad de su cliente con las autoridades de EEUU, incluso se afirmaba que existía ya un borrador.
De continuar con aquella negociación, Reyes Arzate estaría aceptando los señalamientos contra García Luna, su jefe, sobre las presuntas reuniones entre policías encabezados por García Luna con miembros del Cartel de Sinaloa y del Cartel de los Beltrán Leyva.
El caso contra García Luna nació en el juicio del siglo, en el que se sentenció a Joaquín el Chapo Guzmán. En el carrusel de testigos que desfilaron por la corte, algunos mencionaron la cercanía del ex funcionario con Sinaloa.
Desde el inicio de la pandemia por coronavirus, la audiencia de Genaro García ha sido interrumpida cuatro ocasiones, lo que provocó la suposición de una negociación entre el estratega de la guerra contra el narco y el gobierno de EEUU.
Iván Reyes Arzate podría declararse culpable en EEUU (Foto: Twitter@MarioBeteta)
Hasta el momento, la Fiscalía de EEUU ha acumulado un millón de páginas de pruebas contra el ex jefe policíaco, detenido en diciembre 2019, en Dallas, acusado de los cargos por narcotráfico y falsedad de declaración.
En 2018, durante el juicio contra Joaquín el Chapo Guzmán, el narco Jesús el Rey Zambada aseguró que hizo pagos millonarios a Genaro García Luna.
Zambada, el primer cooperante de la fiscalía en la causa contra Guzmán, explicó ante un jurado en Brooklyn, Nueva York (EEUU) que realizó en concreto dos pagos para garantizar la protección de su hermano mayor, Ismael el “Mayo” Zambada, fundador y jefe del Cártel de Sinaloa, y evitar así que fuera detenido.
El primer soborno —que se produjo en un restaurante en 2005— ascendía a USD 3 millones. García Luna estaba al mando de la agencia federal de investigaciones. A este siguió otro de entre USD 3 ó 5 millones en 2007 cuando García ya era secretario de Seguridad Pública.
El caso de García Luna salió a la luz durante el juicio contra Joaquín el Chapo Guzmán (Foto: REUTERS)
—¿Se reunió con García Luna en un restaurante?, le preguntó entonces el abogado William Purpura.
“Sí”, respondió el “Rey” Zambada. De acuerdo con el testimonio, el efectivo iba en un maletín y el primero tenía como propósito conseguir que se nombrara como jefe de la policía en Culiacán, Sinaloa, a una persona de confianza del cártel para así “tenerlo en el bolsillo”. El “Rey” aseveró que se trataba de dinero del Mayo.
Además, indicó que García Luna tenía “un compromiso en firme” con el clan formado por los hermanos Beltrán Leyva. Para garantizar la protección de la organización, añadió, entre 2006 y 2007 juntaron con sus sociosUSD 50 millones que desembolsaron a través de los sicarios Édgar Valdez Villareal, la “Barbie”, y José Gerardo Álvarez Vázquez, el “Indio”.
La justicia de Estados Unidos busca demostrar la supuesta relación entre el ex secretario de Seguridad pública de México y el narco en México.