Después de una hora y media de trayecto desde el Aeropuerto capitalino, la Selección de Honduras arribó esta noche a su hotel de concentración, tan sólo para pernoctar una noche y enfrentar este viernes al Tri en el Estadio Azteca.
Ni el entrenador Luis Fernando Suárez, como tampoco los jugadores ofrecieron declaraciones a su llegada, en la cual estuvieron escoltados por elementos de seguridad del hotel, quienes formaron una valla entre el autobús y la entrada del inmueble.
El rival de este viernes del Tricolor prefirió llegar al límite de lo permitido para evitar afectaciones por la altitud de la Ciudad de México y por lo mismo ni siquiera se dieron tiempo para reconocer la cancha del Estadio Azteca.
Los hondureños arribaron después de una semana de concentración en Miami, sede elegida para que ahí se integraran los 14 elementos que militan en Ligas fuera de su país.
A pesar de que esta tarde hubo manifestaciones de maestros alrededor del Aeropuerto capitalino, la comitiva “Catracha” no tuvo mayores inconvenientes para salir de esa zona.
Así, el equipo centroamericano únicamente se trasladará mañana por la tarde a Santa Úrsula, para al final del partido regresar de inmediato a su país, donde el próximo martes recibirán a Panamá.
Los “Catrachos” fueron recibidos por el Embajador de su país en México, José Mariano, quien explicó que les daba la bienvenida a solicitud del Presidente Porfirio Lobo.
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