El tráfico de migrantes centroamericanos hacia Estados Unidos genera ganancias multimillonarias tanto a organizaciones criminales como a agrupaciones menores dedicadas a explotar a las familias que huyen en busca de asilo, reveló una investigación de la organización Corporación Rand.
Se estima que el tráfico ilícito de migrantes desde la región del Triángulo Norte de América Central (Guatemala, Honduras y El Salvador) a los Estados Unidos generó entre 200 millones y dos mil 300 millones de dólares para los traficantes”, reveló el estudio presentado ayer, el cual está enfocado en el análisis de la situación de 2017.
Las organizaciones criminales transnacionales (o TCO, por sus siglas en inglés) cobran a los migrantes una especie de impuesto por permitirles pasar o entrar a territorios a lo largo de su camino a Estados Unidos, agregó el documento del que este diario posee una copia.
Rand calculó que ese derecho de paso fluctúa entre 30 y 180 millones de dólares anuales.
El estudio, titulado El Tráfico de Personas y los Ingresos Asociados: ¿Qué Sabemos o qué Podemos Saber sobre las Rutas de América Central a los Estados Unidos?, fue solicitado por el Departamento de Seguridad Interior (HSD) y se presentó al público ayer.
Los resultados encontrados podrían reforzar la idea de que la Casa Blanca criminaliza a indocumentados.
Brindar al Departamento una mejor comprensión de cómo se estructuran, hacen negocios y financian los grupos que participan en el tráfico de personas podrían ayudar a informar en los esfuerzos para investigarlos e interrumpirlos”, declaró a Excélsior Blas Núñez-Neto, coautor e investigador principal de políticas en Rand.
Victoria Greenfield, economista de la organización, explicó sobre el amplio margen de cifras de ganancias y cobros.
Descubrimos que el contrabando de personas involucra muchos tipos diferentes de actores con ingresos para organizaciones criminales y otros actores, incluidos operadores independientes, que participan en el contrabando de personas”, dijo la experta.
Según el reporte, las TCO no son los principales involucrados en explotar el tráfico de migrantes centroamericanos, sino toda la estructura de organizaciones y grupos que controlan el flujo de migrantes.
El estudio sugiere que el tráfico de personas involucra muchos otros tipos de actores que a menudo operan de manera independiente”, según el texto.
De acuerdo con el documento, las TCO son “entidades criminales que se perpetúan, que desafían el estado de derecho y representan una amenaza potencial para la seguridad nacional”.
Al desplazarse de Centroamérica a Estados Unidos, los migrantes pagan por pasar y contratan a traficantes.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.