Los trabajadores de una fábrica de Pfizer Inc. en Michigan despacharon los primeros envíos de su vacuna contra COVID-19 poco después de las 6:30 a.m. del domingo – lanzando el proyecto de distribución de vacunas más grande y complejo que se haya realizado en los Estados Unidos.
Un video de las instalaciones en Kalamazoo mostró a trabajadores con mascarilla sacando de un congelador cajas de cartón del tamaño de una caja de pizza que contenían frascos de vacunas, y colocándolos en grandes neveras azules, antes de que fueran empaquetados y etiquetados.
Los trabajadores aplaudían y silbaban mientras las primeras cajas eran trasladadas hacia los camiones que esperaban. El momento tan esperado llega cuando las infecciones y muertes por COVID-19 están aumentando en los Estados Unidos. Pasarán meses antes de que la mayoría de los residentes de EU puedan recibir la vacuna contra la COVID-19.
El Gobierno de EU planea liberar las primeras 2.9 millones de dosis a 64 Estados, territorios y ciudades principales, así como a cinco agencias federales. Pese a que esté coordinando los esfuerzos de distribución, los Estados tienen la decisión final sobre quién recibirá las primeras vacunas. El Gobierno federal está despachando los primeros envíos a más de 600 puntos. Las empresas de diversos sectores están presionando a las autoridades estatales y federales para que den prioridad a sus trabajadores en la fila de millones que esperan la vacuna y con ella un regreso a la vida libre del temor a la enfermedad mortal.
Los reguladores de EU autorizaron el viernes el uso de la vacuna de Pfizer y su socio BioNTech, y los agentes de seguridad federales acompañarán los envíos fuertemente protegidos desde la fábrica hasta el destino final.
Hemos pasado meses elaborando estrategias con las autoridades de la Operación Warp Speed y nuestros clientes del sector sanitario sobre la logística eficiente de la vacuna, y ha llegado el momento de poner el plan en acción”, dijo Wes Wheeler, presidente de UPS Healthcare, el sábado.
Fuente: Excelsior