Ante los cambios recientes a la Ley General de Población, el Instituto Nacional Electoral (INE) se mantiene al margen sobre la posibilidad de que la credencial de elector, emitida por el organismo desde 1991, sea reemplazada por una nueva identificación nacional basada en la CURP con datos biométricos. Consejeros electorales reconocieron su desconocimiento sobre los alcances reales de la reforma impulsada por el gobierno federal.
“La CURP que contenga huellas dactilares y fotografía será el documento nacional de identificación, de aceptación universal y obligatoria en todo el territorio nacional”, señala la reforma aprobada por el Congreso, generando especulaciones sobre si el nuevo documento sustituirá al actual instrumento de identificación ciudadana y electoral.
Uuc-kib Espadas Ancona, consejero electoral, dijo que será necesario observar cómo evoluciona la legislación, y subrayó que el INE actuará conforme a lo que la ley determine: “Ya veremos qué pasa con la CURP con datos biométricos; por lo pronto, desde luego el INE hará todo lo que la ley ordena”.
Por su parte, el consejero Jorge Montaño aseguró no tener información sobre una eventual sustitución de la credencial del INE y recalcó que “la autoridad encargada de emitir las credenciales de elector con todas las medidas de seguridad y efectivas es el INE”. Añadió que será importante valorar si el nuevo documento garantizará la seguridad, confiabilidad y funcionalidad en procesos electorales o se limitará a ser un identificador ciudadano.
En cuanto a la orden de la reforma que solicita al INE compartir su base de datos biométricos para la identificación de personas desaparecidas, ambos consejeros recordaron que ya existe colaboración institucional en esa materia. Espadas señaló que “eso es algo que el INE ya hacía”, mientras que Montaño precisó que existen convenios con fiscalías estatales para compartir huellas dactilares con fines forenses, en casos donde los cuerpos no pueden ser identificados visualmente.
Por ahora, el INE sigue reconociendo como vigente su facultad exclusiva de emitir credenciales de elector, y espera mayor claridad legal sobre el papel que jugará la nueva CURP biométrica en los próximos años.