La Celebración de Muertos 2018, que tendrá lugar del 27 de octubre al 4 de noviembre próximo en la Ciudad de México, y que este año estará dedicada a la Migración, espera recibir más de dos millones de visitas y una derrama económica de alrededor de 400 millones de pesos.
En conferencia de prensa, donde se anunció el programa de actividades para la festividad, el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, expresó que este es un evento con raíces históricas y algunos tintes de modernidad, que da una proyección y promoción internacional a México, a su riqueza cultural y turística.
Agregó que esta tradición mexicana milenaria ha atraído la atención de viajeros de todo el mundo, de tal forma, que solo para el Magno Desfile, que se realizará del 27 de octubre, se espera a un millón de personas.
Informó que para dicho desfile, al igual que el año pasado, la Secretaría de Turismo (Sectur) invirtió a través del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) 8.5 millones de pesos.
A ello se suma la inversión de cuatro estados que participarán por primera ocasión en el recorrido con sus carros alegóricos: Aguascalientes, Michoacán, Oaxaca y San Luis Potosí.
“Esta es una manera de llegar a cientos de millones de persona en el mundo, el año pasado tuvimos cerca de 25 mil impactos de artículos, temas de Internet, entre otros. Es un tema que cada vez cuenta con mayor difusión”, dijo.
El funcionario subrayó que las actividades, que incluyen también la Gran Ofrenda del Zócalo Capitalino, del 27 al 4 de noviembre, con una interpretación contemporánea del artista Humberto Spíndola y la antropóloga Gisela Méndez Jiménez.
Además, destaca Un paseo Nocturno en Bicicleta el día 3 de noviembre, y cuya ruta abarcará del Bosque de Chapultepec, continuará por Paseo de la Reforma y concluirá en el Centro Histórico.
El cierre estará a cargo de la cantante Eugenia León, quien ofrecerá un concierto el mismo 3 de noviembre en el Monumento a la Revolución, así como el trovador Óscar Chávez, quien se presentará en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.
“Los turistas ahora buscan experiencias que sean auténticas y qué experiencia más original que venir a vivir el Día de Muertos en el país, que si bien no surgió a raíz de una película (Coco), ha sido promocionada a través de ésta. Tan solo en lugares como China, el interés por vivir esta celebración, luego de ver dicha producción aumentó considerablemente”, anotó.
Recordó que para los mexicanos, celebrar el Día de Muertos es reconocer que el país tiene una identidad a pesar del gran mosaico de pensamientos que existe en todo el territorio.
“En este festejo se juntan temas tan nuestros como la gastronómica, la cocina tradicional, la variedad musical y una serie de elementos que nos dan la identidad que otros países no tienen”, refirió.
El titular de la Sectur agregó que además de una tradición y expresión cultural, también representa la importancia de las familias en México, al ser una festividad entre parientes, en la que se destacan los valores personales.
Respecto a la temática de este año para la ofrenda y la celebración, sobre la Migración, consideró que es un fenómeno mundial y nacional, sobre el cual se debe reflexionar, pues su principal reto es saber si éste debería ser de libre acceso.
Algunos datos que se recordaron sobre el evento en 2017 fueron: más de un millón de personas, mexicanos y extranjeros, se unieron en la celebración de la tradición milenaria, se tuvo una ocupación de alrededor de 165 mil 520 turistas hospedados en la Ciudad de México, de los cuales 132 mil 135 fueron nacionales y 32 mil 115 extranjeros.
La derrama económica por concepto de turistas hospedados en hoteles fue de 963 millones de pesos, lo que equivale a 52.1 millones de dólares. En términos de comunicación, alrededor del mundo y en México, se generaron 25 mil 586 artículos relacionados al mago no Desfile del Día de muertos, equivalente en dólares a 442.8 millones.
A su vez, el director del CPTM, Héctor Flores, comentó que este será el tercer año consecutivo en el que se realizará la celebración del Día de Muertos, tradición declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en 2003, e instaurada en la Ciudad de México por decreto en 2016.