La economía mexicana registró una caída de 1.2% anual en términos reales y con cifras ajustadas por estacionalidad en el primer trimestre del año del Gran Confinamiento, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Al divulgar la cifra final del PIB, el Instituto completó la recopilación de datos que brinda un panorama más completo del desempeño de la actividad productiva, y registró una contracción menos profunda de la que previó en su Estimación Oportuna divulgada hace 20 días, cuando proyectó que la contracción sería de 1.6 por ciento.
Con esta caída en el PIB en el periodo enero-marzo, se acumulan tres trimestres consecutivos en contracción, y se cumpliría con la definición de una recesión técnica conforme la definición del Buró Nacional de Investigación Económica (NBER), que es el Comité para el Fechado de los Ciclos de la Economía de Estados Unidos.
Al inscribirse el dato del PIB en el primer trimestre, se observa un desempeño anual también negativo en 2.2%, que es también una caída menos profunda de la que traía el mismo Inegi en su estimación oportuna del 30 de abril, que estaba en 2.4 por ciento.
El desempeño del PIB anual al primer trimestre de 2020, se convierte así en el peor desempeño para un periodo similar desde el año desde 2009, año en el que iniciaba el periodo de la Gran Recesión.
La revisión del dato respecto de la estimación oportuna en el primer trimestre del año sí sorprendió al economista senior para América Latina de la consultoría inglesa Pantheon Macroeconomics, Andrés Abadía. Sin embargo, aseguró que no cambia el panorama general para las expectativas de este año.
La economía se encontraba en mal estado desde antes del choque por el Covid-19. El dato del PIB muestra que ya tenían un mal estado y los datos que vienen serán terribles, pues esperamos un colapso en el segundo trimestre”, consignó desde Londres.
Para el economista, el repunte de la actividad será modesto a medida que disminuya el choque del Covid-19, sin embargo advierte que el riesgo de una segunda ola de pandemia, mantendrá limitado al desempeño.
Fuente: EL Economista