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Decomisa Colombia cocaína destinada a El Chapo

La Policía de Colombia incautó en una carretera del departamento de Antioquia, noroeste de ese país, una tonelada de cocaína que presuntamente sería enviada a México para el cártel de Sinaloa, que lidera Joaquín «El Chapo» Guzmán, informó este sábado la institución armada.

El envío de droga, valorado en 35 millones de dólares, fue hallado en 866 paquetes dentro de un camión, detenido en un retén policial en una vía entre los municipios de Caldas y Versalles, según precisó un comunicado de la Policía Antinarcóticos.

El decomiso se logró gracias a la información brindada por una fuente humana y en el operativo fue detenido el conductor del vehículo y puesto a disposición de la Justicia por los delitos de tráfico, porte y comercialización de estupefacientes.

La tonelada de droga pertenecía supuestamente a la «Oficina de Envigado», que es uno de los grupos del narcotráfico más importantes de Colombia que fue creado en la década de 1980 por el ahora fallecido capo Pablo Escobar.

El pasado miércoles fue capturado en una lujosa finca ubicada en cercanías a la ciudad de Medellín (400 kilómetros al noroeste de Bogotá) el jefe de esta organización Erikson Vargas, alias «Sebastián», quien será extraditado a Estados Unidos.

Aunque Colombia ha disminuido casi a la mitad tanto la producción de cocaína como la extensión de los cultivos de hoja de coca, todavía encabeza la producción mundial de esa droga, con 345 toneladas de cocaína en 2011, según cifras de la ONU.

«El Chapo» Guzmán está considerado como el narcotraficante más buscado del mundo y ocupa el puesto 55 en la lista de los más poderosos del mundo de la revista estadunidense Forbes.

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Increible

Desaparece en Disneyland y aparece días después en un bote de basura en Mexicali: el misterioso caso de Annie Encino

Una adolescente estadounidense de 16 años fue localizada con vida dentro de un contenedor de basura en Mexicali, Baja California, días después de haber desaparecido en el parque Disney California Adventure, en Anaheim. El caso ha despertado preocupación e interrogantes en ambos lados de la frontera, especialmente por el silencio mediático en México y las lagunas que aún rodean su cruce hacia territorio nacional.

Annie Kathleen Encino desapareció el pasado 20 de abril tras una discusión con su familia dentro del parque temático. Fue vista por última vez alejándose sola, lo que activó una Alerta Amber en Estados Unidos. Sin embargo, esa alerta nunca cruzó a territorio mexicano, dejando a la opinión pública del país sin conocimiento de su desaparición… hasta que la historia dio un giro tan insólito como alarmante.

Días después, una llamada anónima al 911 alertó a la policía municipal de Mexicali sobre la presencia de una menor dentro de un bote de basura. Al llegar al sitio, los oficiales encontraron a la joven en condiciones que no han sido detalladas, pero confirmaron su identidad. El consulado de Estados Unidos fue notificado de inmediato y su madre viajó a la ciudad fronteriza para identificarla y llevarla de regreso.

Hasta ahora, las autoridades mexicanas no han informado cómo fue que Annie cruzó la frontera sin documentos, sin acompañantes y sin ser detectada. Tampoco han revelado si fue víctima de trata, secuestro, abuso o si viajó voluntariamente con ayuda de terceros. La Fiscalía de Baja California mantiene abierta una investigación para esclarecer los hechos.

Lo que sí queda claro es que algo falló en los mecanismos de cooperación fronteriza. Ni la alerta internacional funcionó, ni hubo un protocolo binacional que permitiera actuar a tiempo. La aparición de una menor estadounidense en un contenedor de basura, en una ciudad donde los casos de desapariciones no son novedad, pone una vez más bajo la lupa la crisis de seguridad y el flujo irregular entre ambos países.

Mientras se esperan más detalles oficiales, el caso de Annie Encino evidencia que incluso en un entorno supuestamente seguro como Disneyland, la vulnerabilidad de los menores puede terminar en una historia digna de una serie policiaca.

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