En el anuncio de la segunda parte del gabinete de la próxima era “Claudista” o “Sheimbaunista”, se mantiene el propósito de mostrar certidumbre y seriedad.
Caleb Ordóñez T.
La presidenta electa invitó a sus mejores amigos dentro del servicio público, el pasado jueves al Museo Interactivo de Economía: Sin duda, gente formal, profesional, con extensos curriculums y de carrera propia.
Como si se tratase de un club de estudiosos, de aquellos que se sentaban en primera fila de los salones de clase. Fueron presentados Luz Elena González Escobar, David Kershenobich, Raquel Buenrostro, Jesús Antonio Esteva Medina, Edna Elena Vega Rangel y Rogelio Ramírez de la O, quien no pudo asistir por tener agenda llena, en la secretaria de Hacienda y Crédito Público, ¡Ni a su propio ungimiento fue!
Claudia ha enviado un mensaje sobre que gobernará con gente de su completa confianza. Pero que tienen un perfil técnico y de escritorio.
Son gente sumamente cercana; no hay acuerdos políticos o pagos partidistas. Sheinbaum se notaba relajada, contenta; estaba entre sus colegas, quienes no tuvieron ni siquiera que tomar la palabra.
Claudia tiene muy clara su misión de mostrar certeza de gobierno, ante los mercados para aminorar el golpe de la subida del dólar. Todos estos nombramientos tan adelantados, parecen tener esa intención.
En su talante pragmático, denota incluso que quiere quedar bien con la oposición y aquellos que dudaban de su liderazgo.
Aunque tersa, la transición está acelerada, tan apresurada como nunca habíamos visto en los últimos sexenios. Pareciera que Claudia no solo cuenta con la confianza del presidente para arrancar a todo motor, sino que hay una intención desde el mismo palacio nacional, por empatar lo más pronto posible los gobiernos, salientes y entrantes, a fin de que parezca como si nunca existió una elección de por medio, que la 4T sigue un rumbo, sin detenerse.
Perfiles formales, sensatos y calificados.
El nombramiento más “cantado” se trataba del doctor David Kershenobich, quien llega como un mediador para alivianar y contrarestar la terrible crisis que deja en el ámbito del sector salud, el gobierno de AMLO.