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Semarnat ya investiga a Volkswagen en México

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Tras el escándalo en Estados Unidos por el software colocado a los vehículos Volkswagen (VW) para eludir las normas ambientales, México revisa los certificados de emisión de contaminantes otorgados a la empresa alemana desde 2009, en sus 11 motores a diésel, anunció Rafael Pacchiano Alamán, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
En la presentación del evento «Alternativas Verdes, Ciudades Sustentables», advirtió que en caso de encontrar alguna anomalía la firma automotriz se podría hacer acreedora a una sanción.

Ahorita es un poco pronto el decir qué medidas vamos a tomar, porque primero tenemos que ver si estamos en el mismo supuesto que en otros países; es un ejercicio que estamos haciendo en los 11 motores a diésel que son comercializados, estamos analizando uno a uno los certificados para ver si existe alguna falta, y eso es algo, que sin duda, cuando tengamos el resultado lo vamos a dar a conocer», aseguró.

Pacchiano Alamán destacó que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) es la encargada de hacer esta revisión, pero hay que tomar en cuenta que tan sólo el año pasado, Volkswagen vendió cerca de nueve mil vehículos en nuestro país.
«Los modelos que se comercializan en México que han sido observados, es el Jetta y el Golf, es una labor que está haciendo la Profepa para ver con qué niveles de emisiones fueron registrados estos modelos y veremos si existe alguna anomalía como ha pasado en otros países, por el momento sólo estamos inspeccionando Volkswagen y Audi, que son los que han sido señalados», precisó.

En tanto, Rodolfo Lacy Tamayo, subsecretario de Planeación y Política Ambiental de la Semarnat adelantó que pedirán ayuda a las autoridades de Estados Unidos para conocer las pruebas que realizaron, con el fin de hacerlas a los autos que se comercializaron en México.

Fuente Excélsior

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Marco Bonilla califica como traición la aprobación de la Ley General de Aguas

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El alcalde Marco Bonilla Mendoza calificó como una traición la forma en que se aprobó la nueva Ley General de Aguas, al asegurar que se avaló sin respetar compromisos previos con organizaciones campesinas y productivas.
Bonilla señaló que la votación ocurrió de manera sorpresiva y sin apertura al diálogo, lo que provocó mayor inconformidad entre los sectores afectados. El edil advirtió que la reforma no solo impacta a productores de gran escala, sino que coloca en una situación delicada a miles de familias que dependen de actividades agrícolas en regiones donde el acceso al agua ya es limitado.
El alcalde consideró que el cambio normativo complica el panorama inmediato para zonas rurales cuya producción depende del riego mediante pozos. También indicó que la incertidumbre alcanza a proyectos de inversión en distintos estados del norte del país, pues la falta de claridad en los criterios de uso del agua podría frenar iniciativas agrícolas e industriales.
Bonilla reiteró que el recurso hídrico es determinante para la operación y llegada de nuevas empresas. Reconoció la postura de organizaciones y productores que han mantenido movilizaciones en defensa del agua, al destacar la importancia del sector para la estabilidad económica y social de las comunidades rurales.
El alcalde agregó que el país enfrenta un momento decisivo ante una reforma que, a su juicio, fue aprobada sin consenso y que podría intensificar disputas regionales por el acceso al recurso.

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