Alumnos de la Universidad Tecnológica de Poniente desarrollan diversas bebidas refrescantes a base de plantas regionales, que además de generar nuevas propuestas gastronómicas, ayudan a mejorar la salud y ofrecen alternativas comerciales para productores del campo.
La chaya (Cnidoscolus aconitifolius), la piñuela (Bromelia pinguin) o la naranja agria –un cítrico empleado en la cocina regional-, son plantas y frutos frecuentemente utilizados de manera ancestral para atender problemas de salud asociados a cálculos renales, males estomacales o respiratorios.
Bajo el nombre de “Surcitrich”, Diralmy Ayil Pacheco y Ángel Gallegos Pacheco han combinado tangerina, menta, vodka y piñuela para generar esta bebida, la cual carece de azúcar y puede ayudar a una mejor digestión.
Ayil Pacheco comentó que la piñuela crece de manera silvestre en los montes de Yucatán y su fruto –en forma de vaina- suele sancocharse y se consume el jugo de su interior, por lo general acompañado de sal y chile.
En las comunidades rurales, además de utilizarse como una botana saludable, se la dan a los menores como purgante, en específico contra las lombrices.
La menta se utiliza para aliviar los males estomacales, eliminar malos olores y mejorar la digestión.
En la actualidad, citó, productores regionales han iniciado la siembra comercial de la piñuela, por lo que ya no se dependerá sólo de su colecta durante la primavera, lo que abre una oportunidad comercial para este producto.
Por su parte, Brenda Chan Zacarías y Damián Bacab Flores desarrollaron la bebida refrescante denominada “Khatta”, cuyo compuesto base de elaboración es un extracto de la hojas de naranja agria (Citrus aurantium), fruto muy utilizado en la cocina yucateca para la elaboración de comidas como la cochinita pibil.
Aunque cuenta con muchos beneficios a la salud y crece de manera natural en el estado, es poco utilizada, puede usarse el fruto en la elaboración de aguas de sabor, -es rica en vitamina C-, sus hojas como té e incluso combinarse con bebidas alcohólicas.
En las comunidades rurales, añadió, las hojas de la naranja son utilizadas como un té y permiten calmar el estrés, el dolor de cabeza, las crisis nerviosas, la gastroenteritis, incluso como un tratamiento auxiliar en la anorexia.
Es además una bebida refrescante baja en calorías, ya que ha sido endulzada con sustitutos de azúcar, por eso su consumo regular no provoca sobrepeso como muchos tés o bebidas “saludables”.
Por su parte, Abner Eluzaí Collí Puc ha desarrollado “Kopi”, una bebida a base de chaya y naranja dulce, endulzada con stevia y por sus propiedades es una bebida eficaz en el proceso de rehidratación de quien la consume.
La chaya tiene entre sus propiedades medicinales, la ventaja de ser un efectivo diurético, además de auxiliar en la prevención y eliminación de los cálculos renales, mientras que la naranja dulce local destaca por su contenido y altos niveles de vitamina “C”.
Aunque estas bebidas tienen como fin comercial venderse como alimentos refrescantes, en todos los casos contienen plantas o frutos utilizados por la medicina tradicional maya y alópata para el auxilio en la recuperación de la salud de diversos padecimientos.
Collí Puc estableció que en la actualidad estos proyectos están en búsqueda de financiamiento para poder producirse de manera industrializada y abaratar costos de producción al comprar materia prima de gran escala.
Estas bebidas ya se comercializan de manera local, básicamente en sus hogares, pero “necesitamos concluir los procesos sanitarios, a fin de que se corrobore que son bebidas sanas y aptas para el consumo humano”, puntualizó.
Notimex