La encuestitis sigue haciendo de las suyas. De nueva cuenta los candidatos a las principales alcaldías, Chihuahua y Juárez, echaron mano de dudosas casas encuestadoras para colocarse en los primeros lugares de las preferencias electorales.

Lo ‘curioso’ es que parece que cada vez que un aspirante a un puesto contrata a una casa encuestadora, mágicamente los resultados resultan a su favor, o ¿usted ha visto a un candidato alguna vez en su vida presentando una encuesta en la que va perdiendo? Olvídese de eso.

Pongamos uno de los ejemplos más curiosos: En Juárez los candidatos salieron a presumir sus conteos. En el caso del independiente, Armando Cabada, se aseguró que contaba con 41 puntos de preferencia electoral mientras que Teto Murguía contaba apenas con 22 y Vicky Caraveo quedó relegada a apenas 7 puntos.

Pero de inmediato ‘Teto’ sacó su producto, en la que los resultados se invertían y él iba adelante con 51 puntos, seguido de cabada con apenas 12 puntos y Vicky Caraveo con 22. La estrategia, desde luego, no es sólo pegarle a Cabada, sino posicionar a Vicky para así crear la sensación de que es ella quien lleva las de gane, y así dividir el voto.

En el caso de las aspirantes a la alcaldía de Chihuahua las diferencias no son tan delirantes. La encuesta del Gabinete de Comunicación Estratégica asegura que la aspirante del PRI, Lucía Chavira, lleva una ventaja tan pequeña que no alcanza ni un punto porcentual, pues aparece con 33.2 puntos de preferencias sobre 32.7 de la candidata María Eugenia Campos.

Además Enrique Terrazas aparece con 8.7 puntos y, Manuel Narváez con 4.2 y Abril Padilla con 1.7, pero ojo, el dato que más podría echar luz es que habría un 18.3 por ciento de indecisos, y ahí, en ese nicho, es donde está la diferencia entre la derrota y la victoria.

A su vez, la panista Maru Campos presentó su propia versión en la que ella se barre de calle a Lucía Chavira con 27 puntos sobre 18. A Enrique Terrazas le conceden 9, y los demás rondan entre 3 y 0. Acá el dato de los indecisos se pone también de relieve, pues sumarían 31 puntos.

En el caso de los candidatos a la gubernatura, los resultados suben, bajan, dan la victoria a uno, a otro y son tan dispares y a veces tan ridículos que nos llevaría dos cuartillas detallarlos todos y acabaríamos sólo por meter ruido. Lo cierto es que la única encuesta que valdrá será la de las urnas, cuando usted y todos los ciudadanos comprometidos depositen su voto por los candidatos que prefieran. Nada está escrito aún, por más que muchos insistan en querer manipular.

Pero volviendo al tema de la alcaldía, sigue la lucha centrada en quién es la candidata del gobernador César Duarte, si Lucía Chavira, por su partido, o María Eugenia Campos, por sus simpatías. La controversia se ha centrado en si la entonces diputada panista arropó o no las iniciativas del gobernador César Duarte, en especial las relacionadas con endeudamiento, fotomultas, replaqueos y otros temas controversiales que todos se quieren sacudir.

Y es que mientras Chavira muestra documentos firmados por Campos, el equipo de la panista saca otros donde su firma no aparece, y asegura que esta fue falsificada. También corre la versión de que la firma sí es de Maru, pero en el dictamen jamás se incluyó el tema de la deuda, sino que fue añadido ilegalmente después, y hasta ahorita todo mundo se dio cuenta… Entre tantas versiones, la mayoría de ellas necesariamente falsas, es difícil cuál tiene poco o mucho de verdad, pero en los próximos días se sabrá.

Pero mientras es cierto o no que Palacio respalda a Campos, lo que sí se nota es la distancia entre el grupo baecista que respalda a Chavira y el duartista que no puede ni verla. Los equipos en la capital anda cada uno por su lado, y en los últimos eventos no se han juntado el candidato a gobernador y la candidata a la alcaldía. De que sigue el pique, sigue.

Los que sí han estado muy cercanos a Serrano son los del Partido Encuentro Social, un grupo evangélico disfrazado de partido político, el cual intentó verle la cara a la feligresía al llevar al grupo musical guatemalteco de esa confesión, Miel San Marcos, para luego sacar al escenario a Enrique Serrano apoyado por algunos pastores de ese culto y miembros del PES.

El presidente de la Cofraternidad Ministerial Evangélica de Chihuahua, Guillermo Juárez, de inmediato salió a asegurar que el evento no contó con el respaldo de todos los ministros religiosos, sino sólo de uno, Héctor Lara, y afirmó que no se utilizaron los recursos de los creyentes para promover al candidato del PRI, sino que fue ese partido y el propio PES quienes desembolsaron.

Aunque Guillermo Juárez reconoció que se invitó a todas las iglesias pues creían que se trataba simplemente de un evento religioso, y aunque su logo aparece en la invitación aseguró que este fue tomado de su página sin autorización. También se deslindó de los mensajes de Whatsapp que envió para convocar a los pastores a reunirse con el dirigente nacional del PES en el Palacio del Sol, en el que trataba de seducir a los ministros religiosos con pases VIP. Según él, lo chamaquearon.

También trascendió que Héctor Lara recibió de PRI y PES 800 mil pesos para organizar el evento, que contó con todas las facilidades y resguardo policial para llevarse a cabo en el parque El Palomar, donde se emprendieron oraciones por el presidente Enrique Peña Nieto y César Duarte, y como caído del cielo apareció Enrique Serrano y un ejército de militantes repartiendo propaganda.

El evento salió contraproducente, pues cientos de feligreses expresaron a través de redes sociales su molestia y vergüenza por el hecho de que su fe fuera utilizada como botín político para un candidato. De forma paralela, el presidente nacional del PES, Hugo Erick Flores, decidió que su partido apoyará a Enrique Serrano en la gubernatura, pero buscará sus propios espacios en el Congreso, alcaldías, etc.

Otro ‘show’ se ha visto estos días en Guachochi, Coyame, Parral, Allende y Valle de Zaragoza, despensas, cobijas y láminas han sido llevadas como parte del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), apoyos que curiosamente no llegan en tiempos de desastres naturales sino de campañas políticas. Militantes de PRD y PAN han inundado las redes sociales con videos donde denuncian la situación.
Según nos informan, estos apoyos fueron enviados con motivo de las nevadas que azotaron la región. Pero las autoridades locales pensaron que para qué hacían a la raza salir a enfriarse en esos momentos, mejor los guardaron para cuando hubiera mejor clima… electoral.

Pero si quería ver verdaderos espectáculos, de a de veras, no de los políticos pues no va a poder, pues ya se agotaron los boletos para ver a Juanga en el Palenque, así como para el partido entre Bravos y Necaxa por el ascenso. A lo más que puede aspirar es a ver el penoso show que dio Ricardo Díaz, presidente de la Facultad de Derecho, asegurando que sacaría a todas las gordas de la institución, aparentemente bebido durante una fiesta de antro.