Este domingo 16 de diciembre se conmemoran dos años del asesinato de la activista Marisela Escobedo. La señora recibió un disparo frente a Palacio de Gobierno. Su cuerpo, quedó tendido a las puertas de la sede del poder ejecutivo, que en ese momento y actualmente, se encuentra representado por el gobernador César Duarte Jáquez.

Marisela Escobedo días antes de su asesinato, diciembre 2010

Antes de ser asesinada Marisela Escobedo tenía 11 días viviendo día y noche junto a la Cruz de Clavos. En la Plaza Hidalgo podía verse a la activista rodeada de pancartas y frases que hicieron frente al Gobierno actual y anterior, que permitieron el escape del asesino confeso de su hija.

El 7 de diciembre del 2010 Marisela colocó varias pancartas donde se leía el siguiente cuestionamiento, dirigido directamente al gobernador del estado, César Duarte Jáquez:

«Sr. Gobernador, en 4 meses el asesino de su sobrino está en la cárcel ¿y el asesino de Rubí hasta cuándo?». En las esquinas de la Plaza Hidalgo, colocó mantas donde aseguraba que la justicia es privilegio de gobiernos. Su reproche se basaba en que su hija Rubí Marisol fue asesinada en el 2008 sin que a dos años existiera castigo para el responsable. En cambio argumentaba, el 31 de noviembre de ese mismo años se sentenció al secuestrador del sobrino del gobernador César Duarte Jáquez. El empresario Humberto Medina Vela, fue privado de su libertad y asesinado en el mes de julio del 2010 y el 31 de noviembre (cuatro meses después) se dictó la primera sentencia contra secuestro, quedando pendiente la referente al homicidio.

Un total de 40 años de prisión y el pago de 160 mil pesos le fueron impuestos como condena a Jesús José Reyes Aldaz alías «El Chuy». Otro ejemplo donde sustentaba su reclamo y molestia la activista Marisela Escobedo, fue el secuestro y asesinato perpetrado contra el hermano de la ex procuradora Patricia González, Mario, que fue resuelto en 15 días.

Entre papeles y café Marisela pasó sus últimas horas frente a Palacio de Gobierno. «Aquí me voy a quedar hasta que detengan al asesino de mi hija», dijo días antes a los medios de comunicación, tratando de expresar el dolor que causa perder a una hija. Como firmando su sentencia de muerte, Marisela comentó en varias ocasiones creer que algunos rogaban por su retirada: «están esperando a que sea yo la que se esconda, pero si me va a venir asesinar este hombre que me asesine enfrente para vergüenza del gobierno», repetía refiriéndose a Sergio Barraza Bocanegra, el asesino de su hija Rubí, de quien recibió amenazas en múltiples ocasiones.

La noche de 16 de diciembre del 2010, un automóvil de color blanco se estacionó frente a ella. De éste, salió un hombre desconocido que persiguiéndola hasta la entrada de Palacio de Gobierno, le arrebató la vida.

En el momento del ataque, Marisela estaba colocando otra pancarta y aunque el área es céntrica y resguardada por cámaras, nadie, ni siquiera su hermano que la acompañaba, pudieron hacer algo por salvarla o detener al asesino. De un sólo tiro en la cabeza fue asesinada.

Al día siguiente… 17 de diciembre del 2010

«Quiero decirle al Gobierno y al señor entre comillas Duarte que no sirven para nada. Aquí no hay ya gobierno, aquí solo veo muros, piedras, y ahí en esa piedra, está la sangre de mi mamá…» dijo entre sollozos el joven Alejandro quien junto con su hermano Juan Manuel, lloró la pérdida de su madre Marisela Escobedo y de su hermana Rubí, víctima de feminicidio.

El asesinato de la activista Marisela Escobedo fue repudiado públicamente al Estado y en medio de llanto, indignación e impotencia, miembros de organizaciones ciudadanas exigieron se resolviera el homicidio de la que murió clamando justicia por su hija Rubí.

A la manifestación que se extendió de las diez de la mañana a las dos de la tarde, acudieron decenas de personas. Se cantó el Himno de las Mujeres de Negro en su memoria, se colocó un ramo de flores en el sitio donde fue abatida en manos y su nombre, se unió al de su hija en el monumento a la impunidad: la Cruz de Clavos.

“Yo hablo mucho pero ahora sencillamente no hay un nombre que dar a lo que pasó (…), ahora también a nosotras nos van a matar. ¿A quién le duele tanto que pidamos justicia? ¿o qué quieren? ¿quién quiere que los asesinos queden libres y no busquemos justicia? Sencillamente no encuentro palabras para describir lo que pasó”, repetía entre llanto la señora Norma Ledezma, madre de Paloma, asesinada en el 2002 y cuyo crimen sigue impune.

La señora, narró deshecha a los medios de comunicación cómo durante la tarde anterior a su asesinato, habló con Marisela. «Pero ya no alcancé a volver a ver», confesó mientras sus amigos y parientes intentaban consolarla.

El poder judicial

Hasta la muerte de la activista Marisela Escobedo, el gobernador César Duarte Jáquez ordenó la investigación y suspensión de su cargo a los tres jueces que dejaron en libertad a Sergio Barraza Bocanegra, asesino confeso. Ellos son: Catalina Ochoa Contreras, Nezahualcóyotl Zúñiga y Rafael Boudid Jurado.

Los mismos, fueron suspendidos sin derecho a sueldo a menos de 24 horas de la muerte de Marisela. En este contexto, sobresalió que el presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, Ramírez Benitez, señaló que los jueces podían haber sido sustituidos desde que Barraza fue absuelto en abril de este año, sin embargo la madre de Rubí nunca presentó el documento por escrito requerido para la suspensión.

El Wicked

Anuncia Fiscalía General del Estado detención de «El Wicked» 10 octubre 2012

La Fiscalía General del estado de Chihuahua informó sobre la captura de José Enrique Jiménez Zavala, El Wicked, “presunto autor material” del asesinato de la activista Marisela Escobedo Ortiz, en diciembre del 2010.

Durante su declaración ante el Ministerio Público, Jiménez Zavala, señaló que las organizaciones delictivas La Línea y Los Zetas le ordenaron que asesinara a la activista, ya que el asesino de la hija de Escobedo Ortiz, Sergio Barraza, formaba parte de Los Zetas, según un comunicado emitido por la fiscalía.

Jiménez Zavala explicó que la orden de matar a Marisela Escobedo la recibió de Jesús Antonio Rincón Chavero, El Tarzán, tercero al mando en la estructura de la organización La Línea y quien ya se encuentra detenido, aunque la orden “venía de más arriba”, informó la fiscalía.

“Jiménez Zavala, de 29 años, comandaba una célula de la organización criminal Los Aztecas y de acuerdo a la investigación de red de vínculos, participó en los homicidios de 16 personas que se encontraban al interior del bar El Colorado, el 20 de abril de 2012”, agregó la fiscalía en el documento.

Las autoridades detallaron que Jiménez Zavala fue detenido por agentes de la Policía Única División Preventiva, el jueves 4 de octubre, en el estacionamiento de un centro comercial, cuando iba acompañado de su esposa y sus dos hijos.

En el momento de la captura, El Wicked tenía consigo un arma calibre .38 súper. Estaba acompañado por su esposa, dos de sus hijos, y por Luis Alberto Camacho Ramos, El Toker, a quien le aseguraron un arma calibre .9 milímetros y un cargador con 13 cartuchos útiles, detalló la Fiscalía.

En diciembre de 2011, la Fiscalía del estado informó que el arma utilizada para asesinar a Marisela Escobedo fue empleada en los homicidios de otras 12 personas, según los estudios de balística.

Rechaza Manuel Frayre que el Wicked sea el asesino de su madre 25 noviembre 2012

Juan Manuel Frayre Escobedo descartó que José Enrique Jiménez Zavala, El Wicked (detenido el pasado 8 de octubre), sea el asesino de su madre, Marisela Escobedo Ortiz, y en cambio acusó de la muerte a Andy Barraza Bocanegra, hermano de Sergio, homicida de Rubí e hija de la activista social.

“Sergio le dio la orden a Andy para que matara a mi mamá: queremos que el caso se cierre, pero con la verdad, no con mentiras”, dijo en rueda de prensa en El Paso, Texas, en compañía de su abogado, Carlos Spector.

El jurista sostuvo que hay evidencias para demostrar la participación de Andy Barraza en la muerte de Escobedo Ortiz, quien fue asesinada de un disparo en la cabeza el 16 de diciembre de 2010 frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua.

“El 13 de septiembre de 2010 Marisela denunció ante la fiscalía (del estado) que Andy amenazó con matarla y tres meses después fue asesinada. En Los Angeles Press se publicó que la fiscal Rosa María Sandoval trató de coercionar (sic) a un testigo protegido para incriminar a Marisela con el cártel de Sinaloa”, dijo.

Por su parte, el testigo colaborador Manny García, quien busca asilo en EU y estuvo en la conferencia de prensa, dijo que fue chofer de Escobedo. “La fiscal me pidió que cambiara mi testimonio, pero no quise hacerlo; entonces me dijeron ‘hasta aquí se acabó tu protección, porque no quieres cooperar’”, contó.

En tanto, el abogado dijo que el 14 de diciembre de 2011 Juan Manuel denunció a Andy Barraza ante el Departamento de Policía de El Paso, ya que lo amenazó de muerte en una tienda Walmart, por lo cual fue sentenciado a 90 días de prisión por amenaza.

“Todas estas evidencias han sido presentadas a la fiscalía de Chihuahua, pero ellos anunciaron el arresto de El Wicked. Pensamos que el gobierno de Chihuahua está tratando de cerrar el caso”, puntualizó Spector.

Frayre Escobedo reiteró que desconfía de las autoridades estatales y se declaró dispuesto a entregar las evidencias para que se esclarezca el homicidio.

Asesinato de Sergio Barraza

El 21 de noviembre del 2012, se dio a conocer que Sergio Rafael Barraza Bocanegra, el asesino de Rubí Marisol Frayre, la hija de la activista Marisela Escobedo, murió en un enfrentamiento con elementos del Ejército Mexicano, en el estado de Zacatecas.

La Fiscalía General del Estado y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) anunciaron mediante un comunicado que
la muerte habría ocurrido el pasado 16 de noviembre en la localidad de Joaquín Amaro, ubicada al sur del estado, junto con tres integrantes más de una célula del grupo delictivo Los Zetas a quienes comandaba en esa plaza bajo el apodo de el ¨Comandante Bambino¨.

Un comunicado oficial de la Sedena confirmó el hecho que ocurrió sobre la carretera federal 54 cuando el personal castrense realizaba un recorrido de vigilancia y fue objeto de una agresión armada por parte de integrantes de la delincuencia organizada, por lo que en defensa de su integridad física repelieron la agresión.

El informe castrense confirmó que familiares de la víctima se presentaron ante el Servicio Médico Forense en Zacatecas para identificar al presunto delincuente. De acuerdo con datos difundidos, los militares encontraron en el cuerpo identificaciones a nombre de Sergio Barraza Bocanegra y turnaron el caso a la Procuraduría estatal de Chihuahua.