La fiscalía sudafricana acusó el día de hoy al atleta olímpico Oscar Pistorius de homicidio premeditado, al sostener que el icono deportivo disparó contra la puerta de un pequeño baño detrás de la cual estaba acurrucada su novia después de una pelea a gritos en el Día de San Valentín, hiriéndola fatalmente con tres balazos.
«Ella no podía ir a ninguna parte. No podía correr a ninguna parte», dijo el fiscal Gerrie Nel en una audiencia en la que se decidirá si el velocista puede gozar de libertad bajo fianza mientras es investigado por la muerte de su novia.
El atleta olímpico y paralímpico con ambas piernas amputadas acudió al palacio de justicia de la capital de Sudáfrica escoltado por policías. Luego de escuchar las acusaciones, el atleta sollozó suavemente. Su abogado insistió en que la muerte a disparos de Reeva Steenkamp fue un accidente.
La muerte a balazos de Steenkamp, de 29 años, ocurrió en la madrugada del Día de San Valentín en la casa de Pistorius en un barrio de acceso restringido.
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