En las últimas semanas, la tranquilidad en varias ciudades de Sinaloa se ha visto interrumpida por una ola de enfrentamientos armados entre grupos del crimen organizado y fuerzas de seguridad. Los habitantes viven con temor ante la creciente violencia, especialmente en regiones como Culiacán, Mazatlán y Los Mochis, donde la presencia de operativos y bloqueos ha sido constante.
Familias enteras han optado por no salir de sus casas, mientras que escuelas y negocios han cerrado temporalmente por seguridad. “Ya no sabemos cuándo es seguro salir”, comenta Ana López, habitante de Culiacán. “Los tiroteos se han vuelto impredecibles y nos sentimos en medio de una guerra”.
Los enfrentamientos se han intensificado tras operativos de las autoridades, quienes buscan debilitar las estructuras del crimen organizado en el estado. Sin embargo, esto ha generado represalias violentas que han incrementado el miedo en la población.
Ante esta situación, líderes locales han pedido al gobierno federal una mayor presencia de fuerzas de seguridad, mientras que los ciudadanos exigen paz. Las redes sociales han servido como una herramienta para mantenerse informados sobre zonas de riesgo, pero el temor persiste.
