Jessica es la jefa de probadores de juguetes y el juego se convirtió en su empleo real, pues a sus manos llegan todos los productos de la empresa juguetera Tomy, antes de salir al mercado.

Esta pequeña es la probadora oficial de juguetes y recibe en la puerta de su hogar los productos de la empresa, los prueba y al final puede quedarse con los juguetes.

La niña es estudiante de Greenhithe, en Kent, Inglaterra y aunque tiene las actividades de niña normal, también puede presumir que posee el mejor empleo que cualquier niño desearía tener.

La madre de Jessica afirma que la compañía puede confiar en la opinión honesta de la pequeña experta en juguetes.