Las inundaciones y avalanchas de tierra causadas por el monzón en Sri Lanka causaron 91 muertos y 110 desaparecidos este viernes, anunciaron las autoridades.
«El saldo ha aumentado a medida que llega más información de áreas que hasta ahora eran inaccesibles» informó un responsable del Centro de control de desastres en Colombo.
Más de 20 mil se han visto afectadas por las inundaciones que desde anoche golpean el suroeste de Sri Lanka a causa de las fuertes precipitaciones de los últimos días, informó una fuente oficial.
Las inundaciones afectan a cinco de los 25 distritos del país, incluida la capital y las zonas adyacentes, donde se han desplegado 250 efectivos y 28 unidades de rescate del ejército así como 85 de la Armada para recuperar a las personas atrapadas, dijo el secretario del Ministerio de Gestión de Desastres, S.S. Miyanawala.
También toman parte en las labores de emergencia seis helicópteros y 21 embarcaciones después de que la situación se deteriorase en las últimas 24 horas.
El secretario situó en unos 20 mil 700 el número de afectados y detalló que muchos permanecen atrapados en las zonas golpeadas.
«Actualmente nos estamos centrando en las operaciones de rescate, hay gente atrapada en cuatro distritos: Rathnapura, Kaluthara, Galle y Matara. Estamos actuando para desplegar barcos y helicópteros para rescatar a la gente atrapada», apuntó Miyanawala.
En mayo del año pasado, lluvias torrenciales vinculadas con una depresión atmosférica en la Bahía de Bengala causó cerca de un centenar de fallecidos y 300 mil desplazados en el país isleño.
Con este precedente en mente, las autoridades han ordenado evacuar también zonas afectadas por las inundaciones de 2016 y se han lanzado alertas por posibles corrimientos de tierra en 8 distritos del país.
Aunque las lluvias son comunes en Sri Lanka durante la época del monzón que sacude el Sur de Asia cada verano, éste no ha llegado todavía a la isla y las inusuales precipitaciones de los últimos días se producen después de meses de sequía.
A finales del pasado año el país isleño fue golpeado por su peor sequía en una década.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.